La segunda jornada del megajuicio contra el juez federal suspendido Walter Bento, casi todos los miembros de su familia y cerca de 30 imputados dejó a la vista tensiones entre quienes están sentados en el banquillo de los acusados y ciertas críticas y fastidios entre los abogados que los defienden.
Una denuncia por supuestas amenazas fue la mayor sorpresa. Juan Ignacio Aliaga, hijo del del despachante de aduanas que fue asesinado en 2020 y cuya muerte fue una de las puntas del ovillo de la investigación contra Bento por asociación ilícita, pidió el micrófono en plena audiencia para realizar la denuncia.
“Ayer (por el miércoles) recibí una amenaza de Alba cuando iba a tomarme un café”, exclamó Juan Aliaga, antes del receso del mediodía. Fueron las únicas palabras que alcanzó a decir, ya que la presidenta del tribunal, Gretell Diamante, consideró que si tenía una denuncia que hacer debía presentarla ante el fiscal.
Aliaga está imputado en el juicio por falso testimonio y la persona a quien acusó es Jaime Alba, uno de los principales acusados. El abogado Alba se encuentra procesado por haber sido considerado organizador de la asociación ilícita que, de acuerdo con la investigación, comandaba el juez Bento.
Según la construcción del caso, Alba estaba apenas un escalón más abajo de Aliaga padre en la estructura y junto a otro abogado, Luciano Ortego, eran una suerte de “nexo jurídico” entre Bento y los imputados y posibles pagadores de coimas para recibir beneficios judiciales.
La denuncia de Juan Aliaga sorprendió a algunas abogados, quienes comentaban que Alba “supuestamente era amigo de su padre”. A pesar de su intervención en la audiencia, luego el denunciante no amplió la denuncia ante la prensa.
La queja del abogado de Bento
Otro dato relevante de la segunda jornada del juicio fue el fastidio, que se convirtió en queja del abogado principal de Bento, Mariano Fragueiro Frías, ante la extensa lectura de la elevación a juicio. Se trata de más de 700 páginas que serán leídas durante varias jornadas antes de que comience el debate en sí.
En tono moderado, Fragueiro aprovechó el receso para marcar su molestia. “Le pido al doctor Vega que reconsidere la continuación de la lectura de los requerimientos de elevación a juicio”, afirmó, y explicó que el pedido tiene que ver con la extensión del texto.
“Sería oportuno avanzar al juicio, que el fiscal seleccione qué quiere que se lea y pasar a la próxima etapa, porque no estamos cómodos a veces”, afirmó Fragueiro, también a través del micrófono. La imagen mostró que en la sala de audiencias de tribunales federales estaban bastante apretados los abogados e imputados de la causa.
“Pasar al debate propiamente dicho es elemental”, agregó el abogado de Bento, pero el fiscal Dante Vega se opuso a suprimir esta etapa.
La jueza Diamante aclaró que la lectura había sido acordada en la audiencia preliminar y después el fiscal directamente cruzó a Fragueiro Ríos. “No veo otra forma de empezar el debate que con la lectura de la acusación, como lo dice la ley. Si no se da pie para una posible nulidad”, afirmó Vega. Y agregó: “No queremos que a futuro los imputados digan que no sabían de qué se los acusaba, es importante que estén presentes para conocer el contenido de lo que se lo acusa”.
Vega afirmó además que “es imposible prescindir de la lectura porque la acusación está redactada de un modo tal en el que hechos y pruebas se mezclan”.
La queja de Fragueiro no fue la única, ya que otro abogado de imputados, el mendocino Pablo Cazabán, también solicitó medidas para poder organizar la agenda laboral.
Lo cierto es que al final hubo algunos acuerdos. Vega hizo concesiones y aceptó hacer “un resumen para ir a lo específico de los imputados” .
Cuándo arranca el debate
La presidenta del tribunal confirmó finalmente que se continuará con una lectura abreviada. “Vamos a omitir dos autos de elevación a juicio”, anunció, y afirmó que “en una de esas en la quinta jornada terminaríamos, y en la sexta se comenzaría con el debate”.
La modalidad del juicio, cuyo tribunal está integrado por tres magistradas de otras provincias, establece que haya tres audiencias cada 15 días. Mañana se completará recién la tercera. Hasta aquí, más allá de los incidentes de este jueves, todos los participantes se limitaron a escuchar los detalles de la investigación del Ministerio Público Fiscal.
Fueron jornadas de más de siete horas de exposición por día a cargo de las secretarias Tribunal Oral Federal Número 2, en las que hasta aquí se reprodujeron hasta las conversaciones por chats que supuestamente incriminan a Bento y al resto de los integrantes de la banda. Hasta el abogado de Bento reconoció el esfuerzo de las secretarias en la lectura.
Después de este viernes, se han dispuesto las próximas audiencias para los días 9, 10 y 11 del mes que viene. La sexta jornada, en la que arrancaría la parte medular del debate, según el pronóstico de Diamante, caería el 11 de agosto.
La defensa del juez Bento, compuesta por Fragueiro Frías y el abogado mendocino Gustavo Gazali, asegura que el juez acusado de liderar una asociación ilícita que cobraba coimas a cambio de favorecer a presos está dispuesto a hablar en el juicio y a responder por primera vez las preguntas del fiscal. Incluso Fragueiro sugirió que esto ocurriría al comienzo del debate, aunque por ahora nadie define en concreto cuándo lo hará.