El diputado del PRO y miembro del Consejo de la Magistratura Pablo Tonelli elevó la tensión interna que se vive en el organismo con una carta en la que solicitó la remisión “urgente” del expediente en el que es investigado el juez Walter Bento.
Además, hizo público un “proyecto de notificación” que el consejero ya tiene listo y en el cual cita a Bento a comparecer en la sala de reuniones del plenario del Consejo de la Magistratura por una gran cantidad de irregularidades.
En esta notificación de 74 páginas, la fecha de la convocatoria al titular del Juzgado Federal Número 1 sólo tiene puntos suspensivos, justamente porque aún no toma control del caso, debido a una extraña dilación que hay quienes atribuyen a una protección del kirchnerismo en la Magistratura.
La notificación de Tonelli tiene que ser votada por los integrantes de la comisión de Acusación que Tonelli preside y se denomina “dictamen del artículo 20″, en referencia a ese punto del reglamento de la ex comisión de Disciplina y Acusación, que ordena citar para que se defienda a un juez cuestionado antes de la presentación de un dictamen acusatorio.
El legislador del PRO decidió adelantar el contenido de esta notificación para meterle presión a la presidenta de la comisión de Disciplina, que es la senadora oficialista María Inés Pilatti Vergara. La legisladora chaqueña tiene bajo su control la totalidad de los casos de jueces cuestionados. Son más de 250 expedientes, entre ellos, el de Bento.
Pero de acuerdo a la nueva organización del Consejo de la Magistratura, los casos más graves, que pueden derivar en la suspensión del juez, tienen que ser tratados en la comisión de Acusación, que fue escindida de la de Disciplina. Son 56 en total y entre ellos figura el caso del magistrado mendocino acusado de recibir coimas a cambio de beneficios judiciales..
Dilaciones
En su nota, Tonelli señala que la solicitud de traslado de la causa Bento y del resto de los casos más graves ya fue realizada formalmente el 27 de junio pasado. “La selección e individualización de expedientes no ha sido realizada de manera arbitraria ni caprichosa”, advierte.
La única reunión de la comisión de Disciplina para tratar el tema se hizo el 15 de julio, pero lejos de completarse el trámite, hubo un fuerte debate entre los integrantes del consejo. Ahí quedó de manifiesto, entre otras cosas, la resistencia de habilitar este traspaso por parte de algunos jueces.
Tonelli señala que en la reunión en cuestión “no se dio respuesta a lo requerido y se postergó la resolución, debido a diversos argumentos, a mi juicio, infundados y dilatorios”. El encuentro no tuvo definiciones y tampoco se agendó una reunión para resolver el problema más adelante.
Desde entonces ha transcurrido más de un mes con el caso Bento en un limbo y la de Tonelli es la segunda nota de reclamo que recibe Pilatti. También le había hecho antes el mismo pedido la consejera Jimena de la Torre, quien representa a los abogados del interior del país.
De la Torre consignó en su escrito los planteos que en una visita a la provincia le hizo el Colegio de Abogados de Mendoza, que también se quejó de la falta de resolución del caso Bento.
El proyecto de notificación de Tonelli da un paso más en este sentido. Según Tonelli, “se encuentran reunidos los elementos suficientes para convocar al magistrado Bento, en los términos del citado artículo 20 del reglamento de la comisión de Disciplina y Acusación, por haber prima facie incurrido en conductas enderezadas a recibir dinero u otros bienes a cambio del dictado de resoluciones judiciales favorables a quienes han realizados dichos pagos, en su rol de jefe u organizador de una asociación ilícita”.
Más acusaciones
En el resumen del legislador, se acusa también a Bento de “haber experimentado un enriquecimiento patrimonial apreciable e injustificado y haber desplegado maniobras destinadas a dar apariencia de lícitos a fondos de origen ilícito”. Señala además que el juez mendocino está acusado de “actos de falsedad ideológica” y “actos de infracción al deber de un magistrado”
“A su vez, se establece que se encuentra prima facie acreditado que el magistrado Bento ha falseado y omitido insertar datos en sus declaraciones patrimoniales juradas integrales presentadas ante este Consejo, en violación a lo establecido en la normativa aplicable”, agrega el documento.
Y hay más, ya que Tonelli hace referencia a una intromisión ilegal en la investigación penal. “También, se encuentra prima facie acreditado que Bento ha intentado evadir la normativa procesal penal, al intentar interiorizarse, a través de organismos públicos, del avance de la causa, sin cumplir con la condición de ser parte”, dice la nota, y agrega que “ha intentado frustrar el resultado de las medidas de prueba dispuestas”, con lo cual “ha atentado contra el normal desenvolvimiento del trámite judicial”.
Le atribuye también haber “contravenido la normativa aplicable a los concursos ante el Consejo de la Magistratura de la Nación”, además de haber “contravenido el régimen contra la evasión fiscal” y “tenido comportamientos contrarios al decoro y a la dignidad con la que debe obrar un juez de la Nación, siguiendo un patrón de conducta impropio para un juez federal”.
Hay que recordar en este sentido que el juez, en la faz penal, tiene más de una decena de pedidos de prisión preventiva emitidos por su par de San Rafael, Eduardo Puigdéngolas, por la investigación de las coimas.
Sin embargo, esas medidas no se aplicarán mientras Bento conserve sus fueros. Sólo los perdería en el caso de que el Jury de Enjuciamiento lo destituya. Pero para llegar al Jury, dos tercios de los integrantes del Consejo de la Magistratura debería votar antes a favor de la acusación.
Hay quienes consideraban hasta hace poco que había consenso para ese paso, particularmente después de que el Consejo de la Magistratura rechazó en forma unánime una llamativa presentación del juez para participar en un concurso para acceder al cargo de camarista. Pero el limbo en el que ha caído la investigación en los últimos meses volvió sembrar dudas.
El impacto de “la ciudad del pecado”
Uno de los capítulos más importantes de las imputaciones contra Bento tiene que ver con sus numerosos viajes al exterior y las fotografías del magistrado (que fueron obtenidas de un celular secuestrado en la casa del juez) en una limusina, en medio de medio de un bar de copas de champagne; así como aquella en la que se lo mostraba a punto de ingresar a un show de Celine Dion en el The Colloseum, del Caesar’s Palace Hotel de Las Vegas.
Respecto de aquellas fotos, reveladoras de un estilo de vida ostentoso, en la notificación redactada por Tonelli para propiciar la declaración de Bento en la causa de mal desempeño se señala que “una ciudad como Las Vegas, que se destaca por los juegos por dinero, cuya fama está ligada a los excesos y la obscenidad −hasta ser conocida como la ‘Ciudad del Pecado’−, resulta un lugar absolutamente impropio para un juez de la Nación cuya conducta debe estar guiada por los valores virtuosos que se le exigen para desarrollar su función de manera adecuada”.
“La presencia del magistrado, rodeado de elementos suntuosos, dentro de hoteles-casinos, de renombre mundial y en la referida ciudad, resultan absolutamente contrarias al decoro y discreción con el que debe obrar un juez de la Nación. Los magistrados tienen la obligación de comportarse con decoro y discreción en un grado mayor que el común de las personas, pues su conducta está unida, inevitablemente, al prestigio y a la dignidad de la función que desempeñan por la relevancia del papel que la sociedad les ha confiado”, agrega también el informe del consejero acusador.