Pasada la medianoche continuaba deliberando la llamada “Mesa Política” del Frente de Todos. La reunión empezó a las 20 horas y trascendió que la discusión se reflejará en un documento que incluirá un fuerte pronunciamiento sobre lo que se considera “la proscripción de Cristina” y la habilitación para que todos puedan competir en las PASO. El debut de la Mes Política estuvo presidida por Alberto Fernández y contó con la presencia de Sergio Massa liderando la comitiva del Frente Renovador. No participó de la cumbre la Vicepresidenta de la Nación, pero sí lo hizo, para sorpresa de muchos, Máximo Kirchner. Una delegación de gobernadores, de intendentes bonaerenses y una representación de sindicalistas completaron la nómina de 33 presentes (solo 5 mujeres). Tal como pretendía el kirchnerismo, el documento emitido por la Mesa Política incluyó un párrafo referido a la Vicepresidenta de la Nación y al condicionamiento judicial que pesa sobre una eventual candidatura.
La institucionalización del Frente de Todos ocurre a nueve meses del fin del mandato presidencial y a cinco y medio de las PASO. La necesidad de imponer una tregua a la interna entre leales al Presidente y kirchneristas en el inicio de la carrera electoral, más una economía jaqueada por la inflación, precipitaron la convocatoria que hizo Alberto Fernández el 5 de febrero. La presencia de los socios más importantes del Frente de Todos conformó a quienes se sentaron en la mesa política.
Massa fue el último en sumarse a la reunión en Matheu 130, sede partidaria del PJ. Lo hizo pasadas las 20, una hora después de la hora pactada. Antes habían ingresado Malena Galmarini (titular de AYSA) y la presidenta de Diputados, Cecilia Moreau, también por el Frente Renovador.
Desde Olivos, Alberto Fernández llegó junto a la ministra Victoria Tolosa Paz, Santiago Cafiero, el flamante jefe de gabinete, Agustín Rossi, el vicejefe de gabinete, Juan Manuel Olmos (el organizador de la cumbre) y Julio Vitobello.
La sorpresa la dio Máximo Kirchner. El titular del PJ bonaerense apareció con el ministro “Wado de Pedro”. Fuentes kirchneristas habían adelantado que la comitiva estaría compuesta por Andrés Larroque, Anabel Fernández Sagasti, y los sindicalistas Sergio Palazzo (La Bancaria) y Abel Furlán (UOM), además de De Pedro. El Presidente Fernández y Máximo se distanciaron hace un año, cuando La Cámpora rechazó el acuerdo firmado con el FMI. Anoche hubo abrazo. En el salón renovado de la sede, le cantaron el feliz cumpleaños 46 al jefe de La Cámpora a pedido de Agustín Rossi.
También estuvieron los secretarios generales de la CGT, Héctor Daer y Pablo Moyano, además de Hugo Yasky, de la CTA. Los gobernadores oficialistas estuvieron representados por Gustavo Bordet, Jorge Capitanich, Axel Kicillof, Gerardo Zamora y Mariano Arcioni. Martín Insaurralde y el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, fueron algunos de los embajadores de los intendentes del conurbano.
El duro contexto inflacionario y los salarios sin recuperar, se dijo anoche en la mesa, imponen un esfuerzo de todos los socios del FdT para mejorar la gestión. Recién entonces podrán discutirse las candidaturas.
Alberto Fernández pidió el compromiso de los sectores del Frente de Todos para que aflojen las tensiones en el tramo final (y clave) de la gestión. El Presidente se sentó con Wado de Pedro y Massa a sus costados.
En los alrededores de la sede de Matheu 130, poco antes de la cumbre aparecieron carteles callejeros con la consigna “¡Proscripción, un carajo! Cristina 2023″. Entre los sectores kirchneristas crece el operativo clamor para la candidatura de la Vicepresidenta. Anteayer, un grupo de sindicalistas se reunió con Máximo Kirchner para plantearle el deseo de que Cristina sea candidata. Anoche, Yasky, Palazzo y Furlán reiteraron el deseo, esta vez ante la mesa política que encabezó Alberto Fernández.