Alberto Fernández había anunciado que la vacuna contra el coronavirus podría ser aplicada a partir de diciembre a millones de argentinos. Sin embargo, esa idea parece caerse con el paso de los días.
“Esperamos que la mayor parte de la vacuna sea suministrada en el primer trimestre del año que viene”, aseguró Kiril Dmitriev, director general del fondo estatal ruso de Inversiones Directas, oficina que está a cargo del proyecto Sputnik V, la vacuna rusa que comprará el Gobierno.
Sin embargo, según informó La Nación, en una reunión de prensa de la que participó Dmitriev detalló que las primeras dosis llegarán al país desde la India, Corea del Sur y China.
“En lo que se refiere a los plazos de suministro hay muchos elementos a tener en cuenta, como la aprobación por el organismo regulador argentino. Vamos a presentar todos los datos al regulador y esperamos que se apruebe lo más pronto posible. Eso determinará los plazos de suministro de la vacuna”, continuó el funcionario.
Por su parte, Denis Logunov, vicedirector del Centro Nacional de Investigación en Epidemiología y Microbiología Gamaleya, a cargo del equipo de desarrollo de la vacuna, en tanto, señaló a la prensa que el volumen de producción de la vacuna en Rusia para el mes que viene será de 1,5 millones de dosis para fin de mes y que la producción alcanzará entre 3 y 5 millones de dosis mensuales a partir del año que viene.
La semana pasada, el Gobierno anunció que comprará 10 millones de dosis de la vacuna rusa. “Estarían en condiciones de darnos 10 millones de cada una de las dos dosis que requiere la vacuna. Las podemos tener en diciembre acá y en los primeros días de enero podríamos tener, según me dicen, 15 millones de dosis más”, dijo Fernández al sitio estatal ruso Sputnik.
Pero cabe destacar entonces, que difícilmente la vacuna rusa esté lista para diciembre, ya que el proyecto de AstraZeneca recién estaría disponible para su aplicación en abril. Por lo que después de superar la última etapa de transferencia de tecnología, que todavía se hace en la planta de Garín, la producción comenzaría a partir del 26 de noviembre, informaron fuentes del sector.
Además, los lotes de vacunas saldrían en enero rumbo a México, donde se haría el envasado, y luego se redistribuiría para toda la región en abril. Después de hacer pública la compra de vacunas rusas, el Gobierno firmó un acuerdo con AstraZeneca para adquirir 22 millones de vacunas. Esas tampoco estarían en diciembre, sino recién en 2021.
Por su parte, detalla La Nación, la vacuna que desarrolla BioNTech y el laboratorio Pfizer tampoco está claro cuándo estará lista para su aplicación. Albert Bourla, director ejecutivo de la farmacéutica, aclaró en una carta abierta que Pfizer solicitará la autorización a las autoridades de Estados Unidos en la tercera semana de noviembre.
La compañía comunicó el lunes que su vacuna tiene el 90% de eficacia, un resultado que fue acompañado por la comunidad científica. Más allá de que todavía no están claros los tiempos para su aplicación, este proyecto tiene otras dificultades, como la necesidad de mantener la vacuna a una temperatura de -70°, lo que requerirá contar con heladeras especiales para su traslado y guardado.