El gobernador Rodolfo Suárez aprovechó la reunión por Portezuelo en la Casa Rosada para firmar ayer un préstamo por parte de la Nación por $1.900 millones, que servirán para oxigenar un poco las cuentas provinciales. Sin embargo, es menos de la mitad de lo que la Provincia había solicitado, $5.200 millones. De esta manera, Mendoza se transforma en la segunda provincia que menos ayuda recibió del Gobierno Nacional en este programa de asistencia en créditos blandos.
Según información de Casa de Gobierno, una parte de este monto llegará en estos días mientras que en julio llegará el resto del dinero.
La firma del préstamo se dio en la tarde de ayer en el Salón de los Científicos de la Rosada. Participaron el gobernador Suárez y el ministro de Gobierno, Víctor Ibáñez; mientras que desde la Nación estuvieron el ministro de Economía, Martín Guzmán; y Eduardo de Pedro, jefe de la cartera del Interior.
Si bien Mendoza había solicitado que el monto de los créditos fuera de $5.200 millones, recibirá sólo $1.900 millones de este Programa para la Emergencia Financiera Provincial que distribuye el ministerio de Economía. Es la segunda provincia que menos recibió, sólo delante de Misiones, que firmó uno por $1.200 millones, aunque hay que tener en cuenta que la provincia mesopotámica tiene 30% menos de población.
La que más fondos recibió es Tucumán ($6.000 millones) y le siguen Chubut ($5.000 millones), Neuquén ($5.000 millones), Córdoba ($4.800 millones), Santa Fe ($4.600 millones), Entre Ríos ($3.500 millones) Chaco ($2.500 millones) y Santa Cruz ($3.000 millones).
Criterio subjetivo
Según marca el Decreto 352/2020, los fondos de este programa nacional se distribuyen en un 40 por ciento en base al índice de población con Necesidades Básicas Insatisfechas y de cuentapropistas (Indec) y de las personas contagiadas por Covid-19 cada 100 mil habitantes que publica el Ministerio de Salud; mientras que el otro 60% será establecido por el Ministerio “para financiar los requerimientos de aquellas Provincias que presenten necesidades financieras sin fuentes de financiamiento alternativas”.
Es decir que es la Nación la que tiene la última palabra sobre cuánto dinero le corresponde a cada provincia.
Sin entrar en estos detalles, el ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró ayer que “a través del Fondo de asistencia financiera acompañamos a las provincias para mitigar los efectos de la pandemia sobre la economía y atender las necesidades específicas”. Además, agregó que “es fundamental en esta etapa apoyar las economías regionales y sostener el empleo para que a la salida del Covid-19 podamos estimular su desarrollo y retomar un sendero productivo y federal”.
Los préstamos se pagan en 36 cuotas mensuales, iguales y consecutivas, y comenzarán a abonarse en enero del 2021. La tasa de interés aplicable será del 0,10% nominal anual y se calculará sobre el capital ajustado por Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) que elabora el BCRA.
Hay que remarcar que en total son $60.000 millones los fondos que dispuso el ministerio de Guzmán en créditos; mientras que por otro lado, hay que sumar otros $60.000 de Adelantos del Tesoro Nacional (ATN) que los distribuye el ministerio del Interior. De ese monto total, a Mendoza han llegado dos desembolsos, que engloban $1.255 millones, recibidos entre abril y mayo.
En este ítem la provincia también quedó postergada porque se ubicó antepenúltima entre las 24 jurisdicciones donde se repartieron ATN.
Para tener un parámetro, si esos $120.000 millones que reparte la Nación se repartieran según el índice de Coparticipación, Mendoza debería recibir alrededor de $5.500 millones. Sin embargo, sumando los ATN y el préstamo, solo llega a $3.155 millones.
