La fiscal federal Cecilia Incardona y el juez Federico Villena analizan una batería de medidas de prueba en la causa que investiga las irregularidades en el avión de bandera venezolana que arribó el 5 de junio con tripulación iraní. En las últimas horas, el magistrado dispuso que la aeronave quede secuestrada en Ezeiza mientras dure la investigación.
Villena ordenó inspeccionar a fondo la aeronave con el objetivo de buscar documentos y rastros que puedan ayudar a determinar qué estaba haciendo la tripulación en Buenos Aires.
La inspección se realizará en el curso de la tarde y probablemente esté a cargo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que es la fuerza de seguridad federal con jurisdicción en el aeropuerto de Ezeiza, detalla La Nación.
Quienes son los tripulantes
Los 19 tripulantes del avión son 14 venezolanos y cinco iraníes. De estos últimos, uno de ello lleva el nombre de un comandante de la Fuerza Quds, la cual pertenece a la Guardia Revolucionaria Islámica. Esta es considerada por los Estados Unidos como una organización terrorista. De todas maneras, no está claro si es la misma persona.
Cuando ayer fue allanado el hotel donde se alojan, los tripulantes, con ayuda de una intérprete dieron a las autoridades una explicación sobre la inusual cantidad de personas en un avión de carga, que suele tener cinco tripulantes. Lo que explicaron es que estaban haciendo una “transferencia entre empresas”, dado que la aeronave había sido adquirida en febrero pasado por la venezolana Emtrasur, que es una compañía filial del estatal Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa). Antes, la aeronave era de Mahan Air, una firma sancionada por Estados Unidos.
Dijeron que en ese marco estaban haciendo un “reconocimiento de las rutas como arte del entrenamiento y la transferencia de una empresa a otra”, relató a La Nación una fuente de la causa. Los investigadores tomaron con escepticismo estas explicaciones.
Entre los venezolanos hay dos militares
Son argumentos que se parecen a lo que manifestó al titular de la AFI, Agustín Rossi, que dijo que suponía (no con información, sino por sus propias presunciones), que había tantos tripulantes a bordo porque se trataba de dos tripulaciones que estaban siendo entrenadas en el manejo de la aeronave.
Entre los venezolanos hay dos militares, según se supo. Tienen el cargo de teniente coronel de aviación y uno de ellos habría participado de uno de los golpes de 1992 para liberar a Hugo Chávez.
El juez Federico Villena secuestró en el hotel de los iraníes 18 teléfonos celulares y siete tablets, que ahora son peritados por la Policía de la Ciudad.