A una semana del cierre del plazo para la inscripción de alianzas electorales, la interna entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta entró en estado de ebullición por la idea de aliarse al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, y al precandidato presidencial de Avanza Libertad José Luis Espert. En medio de la crisis, los socios del PRO en Juntos por el Cambio reclaman definiciones.
A última hora del martes, el Consejo del PRO se reunió de urgencia por impulso de Larreta y encomendó al titular del partido, Federico Angelini, y al secretario general, Eduardo Macchiavelli, “avanzar en las tratativas” para sumar a Espert, a quien Bullrich ve casi como una amenaza en la contienda nacional.
Sin embargo, Bullrich desconoció la reunión. “No tiene ninguna validez de nada. El Consejo del partido no tiene ninguna capacidad de decidir, puede opinar. Y el problema no es Espert, eso nadie lo discute; el tema es si se abre o no una puerta que después no sabemos cómo termina”, advirtió a radio Continental.
A raíz de esta situación, los presidentes de los partidos aliados de Juntos por el Cambio, Gerardo Morales (UCR), Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) y Miguel Pichetto (Encuentro Republicano Federal) le exigieron a sus socios macristas que decidan “con carácter perentorio” la incorporación de Espert.
“Hace más de un mes tenemos pendiente esta resolución y estamos próximos a llevar adelante nuestras instancias partidarias para ratificar y/o definir el marco de alianzas. La Argentina necesita un Juntos por el Cambio unido, plural y responsable, centrado en los problemas que atraviesan los argentinos y no en internas o sectarismos estériles”, remarcaron.
Paralelamente, se profundizó la grieta entre Bullrich y Larreta por la intención del jefe de Gobierno porteño (apoyada por Morales, Pichetto y Elisa Carrió) de sumar a Schiaretti. La exministra Seguridad alertó que si esa discusión lleva a una ruptura, “depende de Larreta”.
“Sabe que tiene que ir a la cancha en la que está y no inventar meter a Schiaretti cuando tenemos una elección en Córdoba”, lanzó Bullrich, y remató: “Jugá limpio, querer llevarte la pelota porque no podés ganar la elección no vale”.
Sin embargo, Larreta insistió en convocar al mandatario cordobés. “Mi vocación es sumar para cambiar este país. Yo quiero sumar hoy, quise sumar ayer y quiero sumar siempre”, dijo a radio La Red, y puso como ejemplo la ampliación del espacio en la Ciudad de Buenos Aires con Ricardo López Murphy, Martín Lousteau y Roy Cortina.
En la interna se metió también el jefe del bloque de diputados radicales, Mario Negri, quien difundió una carta pública titulada “Llamado urgente a la unidad” y así se sumó al veto a Schiaretti.
“El trabajo de ocho años (…) entró en una zona de turbulencia. Esta escalada debe frenarse ya”, reclamó el diputado por Córdoba, y afirmó que “en estas horas de zozobra es indispensable predicar la unidad con el ejemplo y desterrar las ideas que erosionan la cohesión interna”.
En este contexto, la UCR, la Coalición Cívica y el peronismo de Pichetto esperan que el PRO selle la paz para retomar la reunión de la Mesa Nacional que pasó a un cuarto intermedio el último lunes, luego de que se frustrara el acuerdo para convocar a Schiaretti y a Espert.
La sola posibilidad de un pacto con el cordobés ya dejó un primer herido: el exgobernador salteño Juan Manuel Urtubey, que aspiraba a competir contra Schiaretti en una interna del peronismo no kirchnerista, decidió bajarse anticipadamente de esa pelea.
“No voy a participar como candidato en las próximas elecciones”, anunció en un video publicado en redes sociales, y agregó: “No voy a tomar caminos que me alejen del país que necesitan los argentinos, ni de lo que fui, soy y seré: un militante peronista”.
Urtubey además explicó: “No reniego de mis convicciones, las afirmo. Nunca creí en juntarse en contra de alguien, creo que tenemos que unirnos a favor de algo bueno”.
Por otra parte, quien también descartó una alianza con Juntos por el Cambio es el precandidato liberal Javier Milei. “Es muy tarde, estamos muy cerca del armado de las listas”, argumentó, y añadió: “Tengo una buena relación con la señora Bullrich, y además le tengo aprecio, igual que al señor Mauricio Macri, pero parece que es muy tarde”.
Así se pronunció Milei después de que Macri pronosticara, en su paso por Córdoba, que habrá ballotage entre Juntos por el Cambio y el libertario. Confiado en un triunfo en esa instancia, el expresidente también fogoneó una alianza con Milei, como así también con Schiaretti, pero siempre después de las elecciones.
Mientras tanto, se intensifican las recorridas proselitistas de los precandidatos y tanto Larreta como Bullrich eligieron hacer pie en Rosario, aunque lo harán en días diferentes: el primero estará el viernes y la segunda el lunes, según informaron a este medio desde los comandos de campaña.
Este jueves, Larreta viajará a Tucumán, en la previa de la elección que se celebrará el domingo, para respaldar la fórmula Roberto Sánchez-Germán Alfaro. Bullrich, quien estuvo en la provincia norteña el martes, tiene prevista una recorrida por La Matanza, el corazón del Conurbano bonaerense.