En un contexto de crisis y mayor urgencia alimentaria, la Municipalidad de Ciudad avanza en reemplazar el otorgamiento de bolsones de productos alimenticios por una distribución económica a través de un sistema de tarjetas.
Así lo anunció el intendente Ulpiano Suárez en la entrevista concedida a Los Andes y publicada en la edición de este domingo. “En poco tiempo vamos a avanzar con un sistema de una tarjeta, que reemplace la entrega de alimentos no perecederos. Con un registro correspondiente para que esa persona pueda comprar en un comercio de barrio, si tiene los mejores precios y si no en otro lugar, los recursos que necesite”, manifestó.
Y agregó que “el objetivo es dejar de entregar recursos tangibles y transferir a las familias oportunamente evaluadas, un monto mensual por un tiempo determinado, que sería de $15 mil pesos, lo que representa hoy un bolsón de mercadería”.
“En principio será para unas 250 familias que estén fuera de otros programas de provincia o Nación. Es similar al programa de Ciudadanía Porteña, que funciona hace más de 10 años”, comentó.
“Con este mecanismo buscamos salir de los productos secos del bolsón, para que las familias puedan elegir lácteos, quesos o carne. Seríamos el primer municipio que trasladaría la asistencia a un formato más amigable por la emergencia social”, completó el intendente.
Desde el municipio informaron a este medio que por el momento están abocados al Programa de Fortalecimiento Escolar, que se repetirá por segundo año consecutivo y consta en una entrega económica por única vez de $15.000 para 500 chicos que estudian en el nivel primario o secundario.
Este apoyo económico se realizará durante el mes de febrero, mientras que al sistema de tarjetas buscan lanzarlo durante marzo. Es decir, durante el próximo mes ajustarán los detalles que quedan pendientes, para lanzar la licitación del servicio bancario que contratarán.
Mientras tanto el municipio estudia los cupos, con un máximo aspiracional de 500 beneficiarios y el monto final sería de $15 mil pesos. De todos modos, plan no le escapa a la incertidumbre económica que rodea todas las acciones municipales. Aclararon que ambos ítems van a estar “atados a la situación macroeconómica del país y al presupuesto real con el que cuente el municipio”, que para Ayuda Social Directa hoy es de $100 millones en total (se incluye aquí a Fortalecimiento Escolar).
Vale decir que la recaudación es una de las principales preocupaciones del Intendente, ya que el municipio registró una caída del 10% durante diciembre y la coparticipación, afectada por la pérdida por el Impuesto a las Ganancias, también los afectó.
Según el presupuesto municipal 2024, basado en el cálculo de una inflación anual del 69%, la caída propiciada por Ganancias será de unos $800 millones. Pero con las estimaciones actuales, desde el municipio anticipan una pérdida de $2.400 millones al año, informaron a este medio.
Volviendo al sistema de tarjetas, el mecanismo para controlar que efectivamente ese dinero sea destinado a productos alimenticios es un tema que están analizando con “varias empresas que trabajan con tarjetas”, indicaron. Por lo tanto establecerán como requerimiento en el proceso licitatorio para la contratación del servicio bancario, la garantía de limitar el uso del dinero al acceso de productos alimenticios.
“Se buscará garantizar el control efectivo de ese monto que se le asigne o se le transfiera al grupo familiar, respecto a su destinación al consumo o adquisición de productos alimentarios”, afirmaron y aseguran que las transacciones contarán con la supervisión de Hacienda del municipio.
“Los titulares son evaluados con seguimiento de los equipos sociales y se trata de un número acotado. Puede darse un máximo de 500 beneficiarios, el cual es un número fácil de seguir, entender y controlar”, ratificaron desde el área de Desarrollo Social de Ciudad.
Y completaron: “El objetivo es que desde el municipio se dejen de armar módulos alimentarios compuestos por X cantidad de productos tangibles y que el vecino elija, a través de la transferencia económica que le haga el municipio, a qué productos acceder en función de las necesidades reales que tenga como ciudadano o grupo familiar”.
Aumento de la demanda
En Mendoza hubo un aumento del 25% de la demanda de ayuda alimentaria durante 2023. Según informaron desde la Dirección de Desarrollo Comunitario de la Provincia, se incrementó un 25% en el plazo entre enero y diciembre. A inicios del 2023 eran 50 mil personas las alcanzadas y ahora son 62.500, aproximadamente, las que solicitan un plato por parte del Estado.
En diálogo con Los Andes, el director de Desarrollo Comunitario Ernesto Mancinelli, sostuvo que “mensualmente se viene incrementando la asistencia porque hay un incremento de la pobreza” y señaló que el impacto de la inflación del 25% de diciembre y la devaluación superior al 100% que aplicó el gobierno de Javier Milei, indefectiblemente empeorarán el escenario.
El funcionario dijo que el presupuesto para los alimentos se va ajustando “mensualmente”. Lo cierto es que para el mes de enero destinaron $400 millones para la compra de productos de primera necesidad.
Para el Gobierno provincial será necesario ampliar la intervención pero con “ingenio” de saber que las cuentas públicas también se verán resentidas. Por esto Mancinelli se ha comunicado con los directores de desarrollo social departamentales en busca de mayor articulación, ya que ellos también afrontan sus gastos propios en alimentos.
“Tendremos que intervenir de la mejor manera posible, sabiendo que hay límites presupuestarios y la crisis también afecta a la Provincia y los municipios”, dijo y sostuvo que en ese contexto “no se le puede negar el derecho a alimentarse a la gente”.
