La economía de la de la Argentina está en una olla a presión desde hace mucho tiempo, pero la temperatura volvió a subir: la actividad económica tropezó en febrero, antes de las nuevas restricciones por la pandemia, y los precios no paran de golpear a las familias.
Ayer, el Indec reveló un dato demoledor. Una “familia tipo” de cuatro integrantes necesitó en marzo ya más de 60.000 pesos para no caer por debajo de la línea de la pobreza, debido al fuerte alza que están registrando los precios de la economía doméstica.
Según esos datos oficiales una familia compuesta por un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un hijo de 6 años y una hija de 8 años necesitó exactamente 60.873,68 pesos. Se trata de un salto de 18.878,82 pesos si se tiene en cuenta que la misma canasta tenía un precio de 41.994,86 pesos en marzo del año pasado.
Solo para cubrir las necesidades alimenticias, las familias de cuatro integrantes necesitan 25.685 pesos. En caso de no lograr un ingreso mensual de este nivel, el grupo familiar se encuentra en la línea de la indigencia.
Si bien los datos surgen de la valorización mensual de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total que el Indec hace sobre la base del relevamiento de precios en el Gran Buenos Aires, una zona del país en la que el indicador promedio de pobreza es del 51%, se observa la misma inercia inflacionaria que en el resto de la Argentina.
La canasta básica alimentaria (CBA) se encareció 4,5% respecto de febrero y 48% en comparación con un año atrás. La canasta básica total (CBT), que contiene servicios, anotó un incremento del 5% mensual y 45% anual. La inflación general había sido del 42,6 en el mismo lapso.
Ante este panorama, el gobierno sigue lanzando medidas paliativas para intentar enfriar los precios, pero la situación no mejora. Sondeos privados estiman, no obstante, que la inflación de abril estaría siendo más leve que la de marzo (4,8%), pero ubicándose igual encima del 3%.
Entre esas medidas paliativas, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, anunció ayer que los precios de los televisores, teléfonos celulares, microondas y acondicionadores de aire estarán congelados al nivel que tenían el 1 de abril, con vigencia hasta el 31 de octubre. Esto forma parte de un acuerdo con la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (Afarte).
Menor actividad
Otro dato negativo que reveló el Indec señala que la actividad económica de la Argentina volvió a caer en la comparación mes contra mes después de haber registrado un rebote ininterrumpido desde el piso tocado en abril, lo que enciende luces amarillas.
La actividad económica se contrajo un 2,6% en febrero respecto del mismo mes del año anterior en el que la pandemia de Covid-19 aún no había sido declarada en el mundo y Argentina no tenía casos ya registrados de esta enfermedad infectocontagiosa.
Así lo reveló el Indec este jueves al publicar el estimador mensual de actividad económica (EMAE) de febrero, el cual mostró una baja del 1% en relación con enero, de acuerdo a la medición desestacionalizada.
Tras derrumbarse 17,2% en abril de 2020, la economía emprendió una fase de rebote que se fue dando a medida que los procesos de confinamiento fueron aflojando a lo largo y a lo ancho del país.
Por ello, la actividad había crecido 10% en mayo; 8,1% en junio; 2,2% en julio; 1,9% en agosto; 2,1% en septiembre; 1,3% en octubre; 1,5% en noviembre; 0,6% en diciembre; y 1,9% en enero; mientras que en febrero cayó 1%.
En los primeros dos meses del año, el indicador acumulo una suba de 0,8% en la serie sin estacionalidad y se ubicó 2,3% por debajo del nivel pre-covid de febrero 2020.
Con relación a igual período de 2020, se registraron aumentos en seis de los quince sectores que conforman el EMAE. Los tres sectores de mayor crecimiento en febrero fueron Construcción (+11,7%), Intermediación financiera (+3,5%) y Comercio mayorista, minorista y reparaciones (+3,4%).
En el ministerio de Economía dijeron que la industria creció solo 1,6% interanual y desaceleró debido a que la actividad manufacturera estuvo afectada por varias paradas de planta programadas en el mes.
En cambio, otros sectores siguieron mostrando caídas muy fuertes: Hoteles y restaurantes cayó 38,2% anual; otras actividades de servicios comunitarios, sociales y personales descendió 17,7%; y transporte y comunicaciones retrocedió 15,6%.
Esos sectores fueron los que, en conjunto con pesca (-16,7% i.a.), más disminuyeron en el segundo mes de 2021. En Economía señalaron que de los sectores que cayeron, cinco desaceleraron su tasa de caída.