A pocos días de las elecciones generales, el kirchnerismo presiona con su clásica “campaña del miedo” e instala en las estaciones ferroviarias del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) el precio de tres tarifas del pasaje: la del oficialista Massa, a $56,23 (con subsidio), y la de los opositores Bullrich y Milei, a $1.100 (sin el aporte estatal).
Los polémicos avisos aparecieron en los monitores que muestran los horarios de llegada y salida de los trenes. Allí se transmitió un anuncio que especulaba sobre el posible costo de los boletos en caso de que alguno de los candidatos opositores a la presidencia en la Casa Rosada asumiera el cargo.
Los colores del anuncio van asociados a los partidos políticos, siendo azul para “Tarifas trenes Massa: $56,23″, violeta para “Tarifas Milei: $1.100″ y amarillo para “Tarifas trenes Bullrich: $1.100″. La campaña oficialista concluye con el mensaje militante: “Cuando te hablen de subsidios, esa es la diferencia en tu precio”.
El aviso de “miedo” a los usuarios se basa en la posibilidad de que los candidatos de la oposición eliminaran los subsidios vigentes en el transporte. Sin embargo, ni Bullrich ni Milei habían anunciado públicamente que llevarían el precio de los pasajes a $1.100 o que quitarían el aporte del Estado.
El anuncio del supuesto pasaje a $1.1000 fue realizado por la Asociación Señaleros Ferroviarios Argentinos (ASFA), el Sindicato La Fraternidad, la Asociación del Personal de Dirección de los Ferrocarriles Argentinos y Puertos (APDFA), así como la Unión Ferroviaria, según confirmó Infobae.
La tipografía es similar a la de las comunicaciones oficiales del Ministerio de Transporte.
Tras la viralización de las imágenes, la candidata de Juntos por el Cambio reaccionó con enojo en X y habló de “campaña sucia” por parte de Massa: “Da vergüenza ajena”.
No es el primer aviso que los usuarios del transporte público en el AMBA tienen en tono proselitista. Cuando pasan la tarjeta SUBE para pagar en el colectivo, les aparece el cartel “Sin subsidio $700″. Estos valores fueron dichos por el ministro de Transporte, Diego Giuliano, cuando anticipó sobre la renuncia voluntaria.