Este jueves se desarrolla una nueva audiencia en el megajuicio contra el exjuez federal Walter Bento, acusado de encabezar una asociación ilícita, y desfilarán como testigos, secretarios y empleados del Juzgado Federal N° 1 que supo encabezar hasta que fue suspendido. Los testimonios importantes serán María Gabriela Curri, titular de la secretaría A y María Florencia Elías, de la secretaría B.
Hasta el momento la única exempleada de Bento que declaró como testigo en el juicio fue la titular de la Secretaría C, Mariela Andía, quién esquivó la mayoría de las preguntas que le hizo la Fiscalía pero los acusadores revelaron un dato clave que derivó en una investigación. Carolina Bartolini, otra empleada de esa misma secretaría, le compró un departamento a un detenido que está acusado de pagar un soborno por su libertad: Juan Carlos Molina.
La fiscal Gloria André empezó a inquirir sobre la excarcelación de ese detenido, una solicitud que “fue presentada por el doctor (Luciano, uno de los imputados junto con Bento) Ortego en un escrito de hecho a mano el 12 del 6 de 2019... El 13 del 6 le cambian la calificación y hay una constancia que notifica en ese cambio (a la fiscalía) a las 10 de la mañana y termina concediéndose y firmándose el acta de compromiso de excarcelación de Molina el 13 de 6 a las 13.40″.
Luego, las consultas de la fiscal sobre el expediente fueron develando que en el expediente de Molina, hay dos órdenes de allanamiento firmadas por Carolina Bartolini, quien también le toma declaración el 24 de mayo. El 13 de junio Molina queda en libertad.
Luego, la fiscal André leyó el contenido de una escritura en la que se detalla la compra de un departamento en calle Avellaneda de la quinta sección realizada el 17 de agosto de 2019 (dos meses después de la excarcelación y casi tres de la declaración); los compradores son la empleada Bartolini y su marido; el vendedor es Juan Carlos Molina, el detenido excarcelado.