La pandemia del coronavirus, la crisis económica y la progresiva salida de la cuarentena en Mendoza ha impactado de maneras similares en lo referido a la inseguridad tanto en la provincia como a nivel nacional. Si bien en el ministerio de Seguridad y también en las fiscalías marcan una baja delictiva en este primer semestre respecto al 2019, algunos intendentes se han mostrado preocupados por el crecimiento de los “delitos pospandemia” y planean encuentros con el ministro Raúl Levrino para tomar medidas preventivas.
Tal como detalló Los Andes en su edición del 2 de agosto, las denuncias por robos y hurtos han bajado entre un 30 y un 40% respecto al primer semestre del 2019, en parte por la menor circulación de personas y vehículos en la calle, como también más policías patrullando. No obstante, algunos jefes comunales han salido públicamente a pedir ayuda a la Provincia por el “rebrote” de los actos delictivos, pero también dando a entender que la alerta se abre con el impacto que puede tener en el corto plazo la crisis económica y también la desocupación.
De hecho, hoy el ministro de Seguridad, Raúl Levrino, sostuvo que al abrir las actividades, aumentaron los delitos y comenzó a subir esa curva que estaba aplanada. “Son advertencias que nos llevan a coordinar actividades. Es un concepto que se denomina ‘estrés socioeconómico’ frente a situaciones de pobreza, perdida de trabajo, hacinamiento. Se pueden producir hechos violentos que nos obligan a trabajar específicamente en este nuevo marco de situación”, advirtió.
Intendentes preocupados
Levrino se reunió con el intendente de Rivadavia, Miguel Ronco, quien ya había manifestado su preocupación en el tema del crecimiento de los delitos en el departamento del este.
“Tenemos que evaluar fundamentalmente una situación excepcional, que vivimos en una pandemia donde sí hubo una situación de baja de delitos en el primer semestre. Pero hoy tenemos una serie de picos que se van produciendo y nos obligan a coordinar acciones”, aseguró.
Además, sostuvo que se implementará “mayor operatividad” en los departamentos, destacó que han analizado una serie de puntos neurálgicos donde ha habido más delitos y también adelantó que se intentará avanzar en alarmas comunitarias con conexiones con la Policía, como ya se implementa en Godoy Cruz y Capital. “Vamos a ir controlando estos temas”, expresó.
Ante esto, Ronco consideró que la liberación de las salidas hizo que los robos comenzaran a crecer nuevamente y que por la falta de personal policial, tengan más posibilidad de delinquir.
Uno de los primeros en quejarse por la inseguridad fue el intendente de Maipú, Matías Stevanato, quien además cruzó al Gobierno provincial al indicar que hay una falta de policías en el departamento y que eso también ha influido en el aumento de casos de inseguridad. “La preocupación es por la seguridad en el Departamento teniendo en cuenta que desde el 2015 a la fecha hay 70 efectivos menos destinados a Maipú. Actualmente hay 290 policías, es decir que desde que asumió Cornejo la presencia policial en Maipú disminuyó un 20%”, detalleron desde el municipio.
“Por otra parte hay destinados un móvil policial cada 8.000 maipucinos. Esto se agrava en pandemia, por esa razón hace semanas venimos observando la debilidad de los servicios esenciales en virtud de los infectados con el virus, como ha pasado en San Roque y Beltrán, donde los servicios han sido cubiertos con personal de Rodeo del Medio. Esto sumado a los casos de aislamiento de personal policial, ha resentido aún más la presencia policial”, agregaron.
De la misma manera se manifestó el intendente de San Rafael, Emir Félix. Desde la intendencia sureña señalaron que los pedidos por más policías en el departamento se vienen solicitando desde años atrás; y además manifestaron que como en toda la provincia, han notado un crecimiento de los robos y delitos contra la propiedad.
Por otro lado, en Godoy Cruz el intendente, Tadeo García Zalazar, mantuvo el lunes una reunión con el ministro Levrino, donde se habló sobre la situación actual y también respecto al caso de la quema de vehículos en el barrio Trapiche.
Desde la comuna destacaron que en las denuncias que se han recepcionado aparecen ahora con más frecuencia el robo de cubiertas, enfrentamientos entre bandas y también robos. Pero también se hizo hincapié en las estafas telefónicas con los conocidos “cuentos del tío”, y además robos en viviendas de delincuentes que se hacen pasar por municipales y ofrecen “asesoramientos para evitar el coronavirus y desinfecciones”.
Más allá de esto, pusieron énfasis en el “buen vínculo” entre la Dirección de Prevención de la comuna con el Ministerio y la policía distrital, con el cual se programan acciones en conjunto.
Por otro lado, el jefe comunal de San Martín, Raúl Rufeil, indicó que “se observa un aumento de los delitos en el departamento” y es por ese motivo que el municipio “está a la espera de concretar reuniones de trabajo con el ministerio de Seguridad”.
Por otro lado, agregó que se están articulando con uniones vecinales y organizaciones sociales “un sistema de alarmas comunitarias para mejorar la seguridad de San Martín”.
En tanto, Roberto Righi, intendente de Lavalle, declaró que han expresado su preocupación por la suba de los hechos delictivos al comisario departamental, pero también aseguró que han notado un aumento en el consumo de droga en el departamento. “Los dos temas son preocupantes”, acotó.
Impacto nacional
Una encuesta de la consultora Realle Dalla Torre a nivel nacional marca que la preocupación por la inseguridad escaló 26,8 puntos en julio respecto del mes anterior.
El estudio expresa que si bien la situación económica es el tema que más preocupa a los argentinos, con un 57,3%; la inseguridad la sigue de cerca y es un problema que se ha disparado en las últimas semanas, ya que hoy inquieta al 54,3% de los argentinos, contra el 27,5% que se manifestaba en ese sentido a comienzos de junio.
El análisis, que se dio a través de un relevamiento entre el 27 y 29 de julio a 2.155 personas, agrega que la mayor preocupación se concentra en el Gran Buenos Aires con un 61,3%, pero seguido bien de cerca por los grandes centros urbanos del interior del país, como el Gran Mendoza, en un 59,3%.
A la par, hoy el jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, reconoció que hubo un aumento en los casos de inseguridad “en comparación con marzo” y afirmó que “lamentablemente la provincia de Buenos Aires siempre es noticia” en hechos delictivos.