Una legisladora tucumana de la oposición quedó el lunes a cargo del Poder Ejecutivo, debido a un viaje que hizo a Buenos Aires el actual gobernador interino, Osvaldo Jaldo; más otros dos legisladores que le seguían en la sucesión del mandato. El hecho insólito ocurrió en pocas horas, ya que Sandra Orquera, que milita en el “bussismo”, es la vicepresidenta segunda de la Legislatura.
Es importante marcar que han habido varios movimientos políticos en Tucumán. Todo se dio cuando Juan Manzur, gobernador de Tucumán, aceptó ser el jefe de Gabinete del presidente Alberto Fernández. Tras algún tipo de negociaciones internas, el vicegobernador Jaldo quedó en funciones a cargo del Poder Ejecutivo.
Dentro de este contexto, Jaldo decidió ayer viajar a Buenos Aires junto al presidente y el vicepresidente de la Legislatura provincial, Néstor Regino Amado y Juan Ruiz Olivares, para reunirse con el propio Manzur. Por este motivo, la gobernación quedó temporalmente a cargo de Orquera, que pertenece al partido Fuerza Republicana, que fundó el represor Antonio Bussi.
No obstante, Orquera se definió como la “primera gobernadora” de Tucumán. “Hoy estuve realizando mi labor en casa de gobierno como la primera Gobernadora de la provincia”, destacó en Twitter, con una foto de ella en el despacho.
Pero además, invitó a la Casa de Gobierno a Ricardo Bussi, quien quedó al frente del partido Fuerza Republicana luego de que su padre falleciera en la cárcel, a la que fue condenado por delitos de lesa humanidad, lo que generó además críticas de organismos de derechos humanos a la legisladora.
