La crisis económica no es muchas veces la excusa para no pagar impuestos. Los distintos operativos que ha hecho la Administración Tributaria de Mendoza (ATM) mostraron que vehículos caros y nuevos tenían abultadas deudas.
Sin embargo, hay algunos comportamientos que sí tienen que ver con la crisis y que se observan a lo largo del tiempo, de acuerdo a la información que proporcionó el Ministerio de Hacienda y Finanzas. Uno de ellos es la baja de contribuyentes que pagan el monto anual del Impuesto Automotor que vence en febrero. “Antes la mitad de la gente lo pagaba, hoy es menos de un tercio”, explicó Víctor Fayad, titular de la cartera, a Los Andes.
La estrategia para aumentar la recaudación de en lo que respecta a impuestos patrimoniales tiene acciones concretas encaradas por el Ministerio de Hacienda y Finanzas y ATM. Una de ellas son los operativos que se han hecho en algunos puntos de la provincia, en cercanías de barrios privados o de coquetos restó, difundiendo resultados. El funcionario provincial justificó la medida y sobre todo los puntos elegidos al hacer una diferencia clave: “hay que diferenciar la voluntad de pago, de la capacidad de pago”.
Los autos elegidos son los más caros y relativamente nuevos porque consideran que el propietario tiene poder adquisitivo para afrontar las deudas en impuestos. Se escanea la patente y el sistema no sólo arroja las deudas del vehículo, sino los inmuebles vinculados al CUIT del conductor o conductora. En vehículos de alta gama suelen saltar deudas de 400.000 pesos y mucho más inclusive, y hasta se procedió al secuestro de rodados.
“La mitad de los vehículos que paramos tiene alguna deuda, y la mitad de esos contribuyentes la paga en el momento. Recibimos hasta criptomonedas”, sostuvo el funcionario.
La intención de estos operativos es mostrar que hay control y alentar al pago de estos tributos que, en el caso de Automotores, la liquidación es esperada por los municipios. El 70% de lo recaudado se coparticipa a las comunas que en febrero, mes en el que vence la cuota anual, veían un jugoso ingreso a las arcas.
Sin embargo, hay cambios en el comportamiento de los contribuyentes. “Cada vez menos gente paga el anual, se hace un poco cuesta arriba. Antes la mitad de los contribuyentes lo pagaban y hoy es menos de un tercio”, indicó Fayad.
La evolución de la recaudación en Automotores
En el caso de la mora para el Impuesto Automotor, suele ser dinámica porque los contribuyentes cambian más seguido el auto que una vivienda. Y al momento de vender el rodado, deben cancelar la deuda de este tributo, por lo que la mora suele cancelarse con mayor frecuencia que en el caso de los inmuebles.
De acuerdo a los datos aportados por el ministro Hacienda y Finanzas, sobre los boletos emitidos en el 2016 se recaudó ese año un 65% de lo previsto. Pero con el correr de los años, y al ir pagando deudas anteriores, hoy la mora es del 8%. Es decir, hay un 92% de cumplimento.
Al año siguiente, en 2017, se recaudó el 62% durante ese período y a estos días se llegó al 85%. Un año después, la relación fue 61% durante ese año y 81% actualmente. En 2019 se pasó de recaudar el 60% y tener por estos días el 77%.
La caída se sintió en la pandemia porque en el 2020 la recaudación sobre los boletos emitidos fue del 53% y “todavía no llegamos al 70%, estamos en 69%”, explicó Fayad. En el 2021 fue del 54% lo ingresado ese año y actualmente se llegó al 63%.
Una de las proyecciones que hace Hacienda es que después de 5 años, la mora sea menor al 20% teniendo en cuenta que la del 2016 está en el 8%; la del 2017 es del 15%; del período de 2018 es del 19%; mientras que la mora de 2019, 2020 y 2021 supera el 20%.
Los datos de estos últimos dos años fueron lo que motivó a lanzar los planes de pago que ya se están emitiendo. “En los primeros 8 meses de 2022 ya proyectamos más que lo habíamos recaudado el año pasado”, aclaró el titular de la cartera.
Los planes de pago pueden generarlos deudores de impuestos patrimoniales que se atrasaron en el pago de los impuestos desde que comenzó la pandemia del coronavirus, desde el 2020 en adelante. Con esta medida, el Poder Ejecutivo buscará recaudar entre $3.000 y $3.500 millones mientras dure el plan, que está previsto en 5 años y que se aprobó en la Legislatura en el debate por la ratificación legislativa del Consenso Fiscal.
2023, con topes y más cuotas
Con respecto a los impuestos patrimoniales (automotor e inmobiliario), no hay cambio de alícuotas pero sí en los montos porque se modifica la base de cálculo que en el caso de los automotores, la tabla de precios es la que elabora la Dirección Nacional del Registro de la Propiedad Automotor (D.N.R.P.A.). La que se tendrá en cuenta es la que ese organismo elaborará en diciembre de este año. Para modelos más viejos, se aplicará el avalúo de la Administración Tributaria Mendoza (ATM).
Para proteger a los contribuyentes de los efectos de la inflación se establecen topes de aumento sobre el impuesto liquidado, quedando el 71% de los autos y camionetas con un impuesto automotor 2023 que será como máximo un 60% mayor al liquidado en 2022 (vehículos valuados hasta $2,5 millones).
En tanto que habrá otro tope del 69% para vehículos tasados entre $2,5 y $5 millones. Y, por último, un tope de 79% para vehículos entre $5 y $10 millones.
Los boletos se emitirán en los próximos meses y a excepción de enero, en los meses restantes habrá vencimientos intercalados para el caso de contribuyentes que abonen Impuesto Inmobiliario y Automotor.
Para el caso de los rodados, habrá cinco vencimientos en los meses impares (hoy son cuatro), mientras que para propiedades, serán seis en los meses pares, a diferencia de hoy, que hay cinco.