Gendarmería Nacional Argentina (GNA) presentó en la Justicia Federal de Mendoza un Hábeas Corpus por el cabo primero Nahuel Agustín Gallo, un agente de dicha fuerza que fue detenido en Venezuela cuando ingresó a dicho país para reunirse con su pareja y su hijo.
A través de un comunicado, la GNA explicó que “El Obispado Castrense Argentino, en solidaridad con la institución, entabló comunicación con su par de Venezuela, quien se comprometió a realizar las averiguaciones pertinentes”.
En tanto, se detalló en dicho comunico que, tras conocerse el arresto y traslado de Gallo, “comenzaron las gestiones con la Comunidad de Fuerzas Policiales de América, para tratar de dar con el lugar y las circunstancias del integrante de la Fuerza”.
El texto, que lleva la firma del director Nacional de Gendarmería Nacional Argentina, comandante general Claudio Miguel Brilloni, afirmó que se está brindando todos los medios para aportar las gestiones que se encuentran realizando desde el Ministerio de Seguridad de la Nación.
Por su parte, Brilloni exigió a las “autoridades policiales venezolanas la inmediata libertad de nuestro camarada”.
Quién es Nahuel Agustín Gallo y por qué fue detenido en Venezuela
Nahuel Agustín Gallo es un ciudadano argentino oriundo de la provincia de Catamarca y que integra la Gendarmería Nacional Argentina bajo el rango de cabo primero. Gallo forma parte del escuadrón 27 de Uspallata y, tanto él como su pareja María Gómez (venezolana) y su hijo de dos años, residen en nuestra provincia.
Nahuel estaba de licencia anual en la fuerza y había viajado a Venezuela para visitar a su mujer y su hijo, ya que amos se encontraban en el país caribeño porque desde hacía meses para cuidar a la madre de María.
El gendarme hizo ingreso al mencionado país desde Colombia a través del Puente Internacional Francisco de Paula Santander, en Táchira. Allí fue cuando agentes chavistas lo detuvieron en Migraciones.
Según Gómez, le revisaron el teléfono celular y se le retuvo tras ser sometido a una “segunda entrevista”. Todo indica que la interpretación de mensajes críticos hacia el gobierno venezolano desembocaron en el secuestro del agente.
Gallo había viajado de forma legítima a Venezuela, con autorización de la Gendarmería, para visitar a su familia. No tenía vínculos con operaciones de inteligencia ni con actividades oficiales.
