La Cámara de Diputados empezó este martes a debatir en comisiones el proyecto que establece que no pagarán Ganancias los empleados en relación de dependencia que cobren hasta 150.000 pesos de salario bruto (de bolsillo, 124.500 pesos) y los jubilados que cobren a partir de 8 jubilaciones mínimas. El beneficio tiene un final cantado: la aprobación. Pero la oposición, que garantizó su apoyo, igual pidió ampliar las mejoras y evitar la “discriminación” a otros trabajadores, los autónomos.
En rigor, además de este proyecto sobre Impuesto a las Ganancias, que presentó el presidente de la Cámara Baja, Sergio Massa, se debatió en simultáneo otra propuesta, del Gobierno, que establece una modificación al régimen de Monotributo, para que sea menos costoso el paso de los contribuyentes al régimen general y financiar deudas generadas por la suspensión de la exclusión automática, entre 2019 y 2020 (la AFIP calcula que se trata de 20.000 millones de pesos).
Para el inicio de la discusión de ambas iniciativas, las comisiones de Presupuesto y de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados se reunieron en plenario y escucharon las exposiciones de funcionarios de distintas áreas del Poder Ejecutivo.
El primero en exponer fue el ministro de Trabajo, Claudio Moroni; después, el secretario de Política Tributaria del Ministerio de Economía, Roberto Arias, y por último, la directora de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Mercedes Marcó Del Pont y el subdirector general de fiscalización del organismo recaudador, Julián Ruiz.
Ida y vuelta
El ministro Moroni sostuvo que la mejora en Ganancias propuesta por diputados del Frente de Todos (FDT) y de otros bloques opositores que suelen apoyar al oficialismo, está en sintonía con “la vocación de este gobierno de que el salario real crezca”.
“Con el mínimo no imponible vigente se llegaba a 2 millones de personas —alcanzadas por el impuesto—, y la modificación que proponemos permitirá volver a valores históricos que era de entre el 8 y el 10 por ciento de los trabajadores asalariados”, señaló el funcionario al participar por videoconferencia del plenario de comisiones.
En la oposición, el radical misionero Luis Pastori señaló que “subsiste un problema para los jubilados que pagan Bienes Personales, por superar un patrimonio de 2 millones de pesos, porque no va a tener acceso al beneficio, mientras que un trabajador en relación de dependencia que también paga Bienes Personales sí podrá acceder al no pago de Ganancias”.
El diputado de Juntos por el Cambio (JPC) también alertó sobre el salto que se produce a partir de los 150 mil pesos de salario bruto y al respecto afirmó que “pasado este monto hay grababilidad plena”, lo cual también “es injusto”.
“¿Qué pasa con los que están en el rango de entre 150.000 y 173.000 pesos, ya que el proyecto delega al Poder Ejecutivo facultades para ordenar una distorsión en este rango, pero no se sabe cómo se hará?”, preguntó Pastori.
Al respecto, señaló que “el que comience a pagar Ganancias empezará a pagar entre el 27% y el 35%, no pagará las alícuotas inferiores y por lo tanto el impuesto deja de ser progresivo y es regresivo”.
El encargado de responderle a Pastori fue Arias, secretario de Política Tributaria, quien resaltó que no se trata de “una medida temporaria” sino de una “reforma permanente en el impuesto” y que “va a tener mayor progresividad que ahora” y que “no va a ser regresivo ni mucho menos”.
Actualización
La oposición también reclamó que en lugar del Ripte, un índice de evolución salarial, para actualizar el piso salarial a partir del cual se paga Ganancias se utilice el Índice de Precios al Consumidor (IPC); es decir la inflación. Además, pidieron que la actualización sea semestral, no anual.
El Gobierno descartó esa solicitud de la oposición: Arias argumentó que “más allá del método de actualización, el Ripte refleja evolución de los salarios, que este impuesto se aplica a personas en relación de pendencia” y que “el problema [de los últimos años] es que los salarios crecieron menos que la inflación”.
“El salario creció 18-20 puntos menos que la inflación, fundamentalmente entre 2018 y 2019. Nosotros no creemos que esto vuelva a suceder”, sostuvo el secretario de Política Tributaria, un funcionario que está bajo el mando del ministro de Economía, Martín Guzmán.
Pastori también reclamó que entre las deducciones se incorporen “los gastos por educación y por hijos discapacitados” e insistió en que el proyecto incurre en una “discriminación grosera a los trabajadores autónomos”.
Dijo, al respecto, que un profesional autónomo paga Ganancias a partir de 41.000 pesos de ingresos y que si cobrara 124.500 pesos por mes tendría que pagar 10 mil pesos, mientras que los trabajadores en relación de dependencia quedarían eximidos.
Al respecto, Arias respondió que “no está prevista la modificación de Autónomos”, ya que esos trabajadores independientes “que facturan hasta 150 mil pesos entran dentro de la categoría monotributo, con lo cual no están alcanzados por el impuesto a las Ganancias”, por lo que “no se genera inequidad”.
Detalles
Arias señaló que el proyecto provocará un costo fiscal de 41.250 millones de pesos y que 1.267.000 trabajadores asalariados —sobre un total de 2 millones que hoy pagan Ganancias— dejarán de hacerlo, una vez que esta ley quede sancionada.
El funcionario confirmó también que “se incorporan los topes de movilidad y viáticos”, exención del aguinaldo, deducciones por unión convivencial (concubinato), que “la AFIP las va a reglamentar y verá qué certificado va a pedir”; y el beneficio del 22% adicional para la zona patagónica.
Además, recordó que la ley tendrá vigencia a partir del 1 de enero de 2021, con lo cual será retroactiva y a los trabajadores beneficiados por esta propuesta se les devolverá lo que se les haya descontado por Ganancias en estos meses.
Las devoluciones podrían hacerse efectivas recién en abril o mayo, porque la ley, para entrar en vigencia, debe antes transitar el debate en comisiones y ser sancionada por ambas cámaras del Congreso, lo que puede llevar algunas semanas. Pero con aprobación segura y por amplia mayoría, porque la oposición ha confirmado su apoyo desde el primer momento.
Cómo sigue el debate
El jueves ambas comisiones volverán a reunirse para escuchar la opinión de tributaristas y el viernes se realizará otro encuentro de carácter informativo para escuchar a líderes del sindicalismo, quienes ya pidieron que varios ítems salariales queden eximidos de Ganancias.
Por ejemplo, horas extras, viáticos bonos por productividad, gastos de guardería, gastos en educación, plus por desarraigo; horas nocturnas; feriados y días no laborables trabajados; adicionales por trabajos penosos, peligrosos o insalubres; indemnizaciones legales o convencionales; antigüedad; etcétera.
En medio del tormentón de pálidas, como consecuencia del escándalo de las vacunaciones de privilegio, el decidido enfrentamiento con la Justicia y la revuelta popular en Formosa, el avance de estos dos proyectos podría significar una reivindicación del gobierno de Alberto Fernández.
Marcó del Pont lo sintetizó este martes al concluir su exposición: “Esto significa (Ganancias) que más de 40 mil millones de pesos van a ir directamente al consumo”.