La segunda jornada de debate sobre la “ley ómnibus” en la Cámara de Diputados arrancó con malas noticias para el oficialismo. La oposición en pleno cuestionó la reforma electoral incluida en el proyecto y el Gobierno resignaría avanzar con esos cambios (que necesitan de una mayoría especial de 129 votos) para evitar poner en peligro la sanción de la norma.
“Si no están los votos para la reforma electoral, eso no va a trabar el tratamiento de la ley”, sostuvo el ministro del Interior, Guillermo Francos, al participar del plenario de las comisiones de Legislación General, Asuntos Constitucionales y Presupuesto.
Las críticas llovieron no solo desde Unión por la Patria, sino también desde del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal, tres bloques que están predispuestos a facilitar la ley pero quieren incidir en el contenido. Todos reclamaron posponer el debate para las sesiones ordinarias.
“Me llevo todas las inquietudes que se plantearon. Seguramente tendremos que discutir entre lo necesario y lo oportuno y ver cuál es el ámbito en el que podemos avanzar”, dijo Francos.
El proyecto propone ponerle fin a las PASO (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) y modificar el sistema de financiamiento de los partidos políticos, eliminando los topes a las donaciones de privados y el límite máximo de gastos de campaña, además de reducir el aporte estatal.
Asimismo, se actualiza la cantidad de diputados nacionales según el Censo 2022. Para la elección, se busca implementar un sistema de circunscripciones uninominales que reemplazaría al actual sistema de distribución proporcional de bancas.
“¿Qué hace una reforma electoral en esta ley ómnibus? Sin debate, sin participación, sin escuchar a nadie, sin especialistas. Para eso están las sesiones ordinarias. Nunca estos temas se discutieron en extraordinarias”, planteó Germán Martínez, jefe del bloque Unión por la Patria, e insistió: “No es el momento. Debatámoslo a fondo. No le ponga una mordaza al Congreso”.
Margarita Stolbizer (Hacemos Coalición Federal) coincidió en que el tema “no constituye el nivel de prioridad que vive hoy la Argentina”, mientras que desde el PRO, Silvia Lospennato también pidió postergar la discusión para marzo, y además sumó cuestionamientos de fondo.
Tanto Lospennato como Martínez coincidieron en que se corre el peligro de ir hacia un régimen de “partido único”. La legisladora del PRO advirtió además que el sistema uninominal tiene una “mirada antifederal” porque perjudica a varias provincias, y además “es peligroso porque perdería diversidad, la de mayorías y minorías”.
Rodrigo De Loredo, titular del bloque radical, fue tajante: “¿Quién los asesoró de traer estas cosas en este momento y con estas urgencias?”. El cordobés enfatizó: “Vamos a darle al Gobierno las herramientas más urgentes para que salga de este contexto frágil en lo económico, por eso pedimos que el Gobierno priorice, que focalice, que esté atento a la marcha de la economía”.
Eliminación de las PASO
Al abrir su exposición, Francos defendió la eliminación de las PASO, al sostener que “no han sido de utilidad y siempre han implicado un costo enorme para el Estado que no tiene una justificación en el resultado”.
Francos explicó que se busca “trasladarle a los partidos políticos la tarea de organizar y financiar las internas para elegir a sus candidatos”.
“Las PASO fueron un sistema que sirvió en algún momento para generar una mayor participación, pero terminó convirtiéndose en un instrumento anodino que no sirve a sus fines”, sostuvo el titular de la cartera de Interior.
En ese sentido, precisó que las últimas elecciones PASO demandaron un costo de “11.000 millones de pesos”. Según detalló, compitieron 15 agrupaciones políticas y 10 no pasaron el “piso” de votos previsto por la ley para participar de las elecciones generales. Solamente en 2023 se gastaron $11 mil millones entre aportes de campaña y boletas electorales para 15 agrupaciones políticas, 10 de las cuales no pasaron el piso previsto por la ley”.
Francos destacó que “las modificaciones en el sistema político argentino” planteadas en el proyecto de “ley ómnibus” pueden “ayudar a generar un proceso de transformación y de cambio en la vinculación de la política con el pueblo”.
“Tenemos un compromiso desde nuestro espacio, un espacio que sin estructura histórica ni definida, sino a través de la personalidad de un líder como Javier Milei, ha sabido interpretar los cuestionamientos del pueblo a la dirigencia política”, señaló ante los diputados.
También indicó que apuntan a “simplificar el calendario electoral”, al recordar que en 2023 “pasamos de tres a seis elecciones según el distrito”.
“Hemos sometido a los ciudadanos a elegir seis veces en algunos distritos, tres en los mínimos, en elecciones municipales, provinciales y nacionales”, puntualizó.