La hija de la vicepresidenta, Florencia Kirchner, salió a “bancar” a su madre, y a través de una historia de Instagram le dio su apoyo a Cristina Fernández de Kirchner, luego de la publicación de la carta contra el presidente y su entorno.
“Clarísima”, escribió Florencia, calificando la habilidad de su madre para expresarse a través de las palabras. Junto a ello, ofreció a sus seguidores y demás internautas un vínculo para que pudiesen acceder al escrito.
Cristina Fernández de Kirchner decidió salir al cruce de distintas informaciones y versiones surgidas tras la catástrofe electoral del oficialismo en las PASO y las posteriores renuncias en cadena de algunos funcionarios kirchneristas. En una carta pública, la Vicepresidenta de la Nación criticó con dureza al entorno de Alberto Fernández, blanqueó su disconformismo con la dirección de la economía (aunque reiteró que no le pidió la renuncia al ministro Guzmán), contó que el martes pasado le propuso al presidente remplazar a Santiago Cafiero por el gobernador de Tucumán, Juan Manzur.
“Sé que gobernar no es fácil, y la Argentina menos todavía. Hasta he sufrido un vicepresidente declaradamente opositor a nuestro gobierno. Duerman tranquilos los argentinos y las argentinas… eso nunca va a suceder conmigo”, escribió Cristina Fernández, aludiendo a Julio Cobos, quien permaneció como su vicepresidente, pese a pasarse a la oposición tras la 125.
Qué dijo Cristina Fernández en su carta contra Alberto Fernández
En la carta, detalla su relación con el Presidente Fernández y de acontecimientos ocurridos tras las PASO. Cristina Kirchner recuerda dos anteriores pronunciamientos suyo. Una carta del 27 de octubre del año pasado, cuando escribió sobre “los funcionarios que no funcionan” y su discurso del 18 de diciembre pasado, en el Único de La Plata. En esa oportunidad, habló de la necesidad de “alinear salarios y jubilaciones, obviamente, precios, sobre todo los de los alimentos y tarifas”, para que el crecimiento de la economía “no se lo queden tres o cuatro vivos”. Esa vez volvió a pedirle coraje a los funcionarios y sino que “vayan a buscar otro laburo”.
Cristina Fernández dijo que este año tuvo 19 “reuniones de trabajo” en Olivos. “Nos vemos allí y no en la Casa Rosada a propuesta mía y con la intención de evitar cualquier tipo de especulación y operación mediática de desgaste institucional”, escribió.
“En las primeras 18 reuniones, la última de ellas el 07/09/2021, siempre le plantee al Presidente lo que para mí constituía una delicada situación social y que se traducía”, escribió Cristina, “sin desconocer, obviamente, el impacto de las dos pandemias: la macrista primero y la sanitaria a los 99 días de haber asumido el gobierno. Igualmente siempre remarqué la falta de efectividad en distintas áreas de gobierno”.
Cristina Fernández dijo que le señaló que el Gobierno estaba “llevando a cabo una política de ajuste fiscal equivocada que estaba impactando negativamente en la actividad económica y, por lo tanto, en el conjunto de la sociedad y que, indudablemente, esto iba a tener consecuencias electorales”.
“No lo dije una vez… me cansé de decirlo… y no sólo al Presidente de la Nación. La respuesta siempre fue que no era así, que estaba equivocada y que, de acuerdo a las encuestas, íbamos a ganar ‘muy bien’”, dijo.
“Fui, soy y seré peronista. Por eso pensaba que no podíamos ganar. Y se lo decía no sólo al Presidente. Muchos compañeros y muchas compañeras escucharon mis temores”.
“Mientras escribo estas líneas tengo el televisor encendido y leo un graph: “Alberto jaqueado por Cristina”. No… no soy yo. Por más que intenten ocultarlo, es el resultado de la elección y la realidad”, escribió para recordar que el FdT sacó 440 mil votos menos que cuando en 2017 ella fue como candidata a senadora por Unidad Ciudadana, con el peronismo dividido.
Cristina Fernández contrastó en su carta la reacción política de su gobierno en 2009, cuando en las legislativas, perdió en Buenos Aires la lista con Néstor Kirchner. “El día lunes siguiente a las elecciones no sólo (Kirchner) renunció a la titularidad del Partido Justicialista, sino que yo como Presidenta de la Nación pedí la renuncia de quien fuera mi Jefe de Gabinete, entre otros”. Aquel jefe de Gabinete era Alberto Fernández.
“¿En serio creen que no es necesario, después de semejante derrota, presentar públicamente las renuncias y que se sepa la actitud de los funcionarios y funcionarias de facilitarle al Presidente la reorganización de su gobierno?”, se preguntó Cristina.
Cristina Fernández confirmó que estuvo el martes en Olivos. “Habían transcurrido 48hs sin que se comunicara conmigo y me pareció prudente llamarlo y decirle que tenía que hablar con él. Allí le manifesté que era necesario relanzar su Gobierno y le propuse nombres como el del Gobernador Juan Manzur para la Jefatura de Gabinete”, contó, recordando que ella alguna vez tuvo diferencias con el mandatario tucumano.
Sin nombrarlo, la vicepresidenta apunta contra Juan Pablo Biondi, secretario de Comunicación. “¿Por qué cuento esto? Porque no voy a seguir tolerando las operaciones de prensa que desde el propio entorno presidencial a través de su vocero se hacen sobre mí y sobre nuestro espacio político”, dijo. Cristina contó que en 2019, antes de formar el gobierno, “Alberto Fernández quería que el Dr. Eduardo De Pedro fuera su Jefe de Gabinete y fui yo la que no estuvo de acuerdo. Mal podría ahora promoverlo para ese cargo (ahora)”.
“El vocero presidencial (…) Es un raro caso: un vocero presidencial al que nadie le conoce la voz. ¿O tiene alguna otra función que desconocemos? ¿La de hacer operaciones en off por ejemplo? Verdadero misterio”. Después de los párrafos contra Biondi, el interrogante es si podrá el Presidente sostenerlo en su cargo. Cristina dijo que se comunicó con Guzmán para negar que hubiera pedido su renuncia. “Las operaciones son permanentes y, finalmente, sólo terminan desgastando al gobierno. Es increíble que no lo adviertan. Es una pena tanto daño autoinfligido”, lamentó.
Sobre el final de la carta, Cristina pide una rectificación en los gastos del Estado, aunque precede la crítica con un halago. “Confío, sinceramente, que con la misma fuerza y convicción que enfrentó la pandemia, el Presidente no solamente va a relanzar su gobierno, sino que se va a sentar con su Ministro de Economía para mirar los números del presupuesto”, dijo.
“Faltan ejecutar, según la previsión presupuestaria, 2,4% del PBI… más del doble de lo ejecutado… con pandemia y delicadísima situación social. No estoy proponiendo nada alocado ni radicalizado. Al contrario, simplemente estoy recogiendo lo que en este contexto global de pandemia está sucediendo a lo largo y a lo ancho del mundo, desde Estados Unidos, pasando por Europa y en nuestra región también: el Estado atemperando las consecuencias trágicas de la pandemia”. La vice recordó que cada punto del PBI es 420 mil millones de pesos, eso significa que está pidiendo gastar alrededor de un billón de pesos en lo que queda del año, especialmente antes de las elecciones.
En el párrafo final le recuerda a Alberto Fernández que cuando lo propuso como presidente lo hizo convencida “de que era lo mejor para mi Patria”. La vicepresidente le pidió al Presidente “que honre aquella decisión… pero por sobre todas las cosas, tomando sus palabras y convicciones también, lo que es más importante que nada: que honre la voluntad del pueblo argentino”.