En un evento organizado por el IAE Business School de la Universidad Austral, Federico Sturzenegger, ex presidente del Banco Central, defendió la decisión de avanzar hacia un superávit fiscal sostenido y negó rotundamente que se esté llevando a cabo un “ajuste”.
Sturzenegger argumentó que la reducción del gasto público liberaría a los ciudadanos del “impuesto inflacionario”. Por otro lado, explicó que “el verdadero ajuste es el gasto, porque la gente tiene que pagar ese gasto. Y lo hará con impuestos o con impuesto inflacionario”.
“Cuando vos bajás el gasto, le liberás a la gente la obligación de pagar esos impuestos. La gente dijo, basta, mi plata la quiero gastar yo. Así que déjenme gastar eso y me devuelves la guita, Milei entendió eso como nadie”, destacó.
El ex jefe del Banco Central subrayó la importancia de consolidar el superávit en las cuentas públicas como “la madre de todas las batallas” para el Gobierno. Asimismo, aseguró que “el mercado está debatiendo la solidez de la corrección fiscal en el primer bimestre del año”.
“Veo que es muy sólida y que hay un gran convencimiento. Va funcionar como un bálsamo para la economía que se va a ver bastante rápido. Vamos a un cambio de paradigma que nadie a logrado”, declaró.
Aunque reconoció el escepticismo persistente en el mercado, afirmó que gradualmente se está generando un mayor convencimiento en las políticas del Gobierno. “El primer mes los bonos estaban en 25 centavos, ahora se acercan a 50 centavos. Están empezando a creer”, agregó.
Federico Sturzenegger también destacó las batallas que el presidente Javier Milei está llevando a cabo, incluyendo una cultural y otra contra lo que denominó “la casta”. En base a esto, indicó que existen “agentes bloqueantes” de las reformas que plantea el Gobierno dentro del mundo sindical, empresarial y político.
En la entrevista, el asesor enfatizó que las reformas propuestas por el Gobierno son estratégicas según el Presidente.
Además, recordó que parte de los proyectos de modificación regulatoria fueron elaborados por su equipo durante los últimos dos años, en previsión de una eventual presidencia de Patricia Bullrich.
Sin embargo, afirmó que los proyectos presentados son solo el 20% de las reformas que les gustaría implementar, pero que fueron prudentes en su enfoque para evitar el rechazo político.
“El proyecto y el DNU son solo el 20% de las reformas que quisiéramos aplicar, fuimos prudentes. Lo que enviamos de una vez lo hicimos porque de lo contrario es más fácil para la política decir ‘esto sí, esto no’ y dejar de lado puntos clave”, concluyó.