Los diputados nacionales por el frente Cambia Mendoza Alfredo Cornejo y Jimena Latorre, junto al puntano Alejandro Cacace, presentaron la semana pasada ante medios de comunicación un proyecto de ley para regular y legalizar la eutanasia asistida, también conocida como interrupción voluntaria de la vida. La iniciativa desde ya ha generado algo de controversia y revuelo en el Congreso, con opiniones divididas sin importar los partidos políticos o alianzas de quienes las conforman. En Mendoza, hay mayoría de legisladores a favor de la eutanasia asistida, más allá de los detalles de los proyectos, que seguramente se revisarán una vez se ponga a consideración tanto en el Senado como en Diputados.
De los 10 diputados, la mitad de ellos votará a favor si se discute este proyecto (podría haber variaciones de algunos dependiendo de lo que diga la letra chica de la iniciativa), 3 se pronunciaron en contra (podrían abstenerse) y dos no tienen todavía posición tomada. En el Senado, los tres están a favor de la eutanasia asistida. Pasando en limpio, el radicalismo completo está a favor, el PRO está en contra en principio; y en el peronismo hay mayoría de legisladores a favor también, aunque otros estudiarán su posición o votarán en contra.
Si bien se trata de una iniciativa a la que le espera un camino largo en el Congreso, se entiende que en algún momento diputados y senadores deberán analizar y estudiar el/los proyecto/s y fundamentar un voto a favor o en contra de una propuesta que sin dudas ha generado controversias y que no tendría mandatos partidarios, como lo fue el proyecto -ya aprobado y reglamentado – de la interrupción voluntaria del embarazo.
Por otro lado, en el radicalismo han decidido trabajar en ambas cámaras, teniendo en cuenta que el proyecto de Cornejo y Latorre fue presentado en la Cámara de Diputados. No obstante, el senador nacional y futuro diputado Julio Cobos, hará lo mismo con otro proyecto que también regula la eutanasia asistida -con algunas variaciones – en la Cámara de Senadores.
“Lo que se está haciendo es darle potencia a un tema, para fomentar el debate en las dos cámaras legislativas”, destacaron desde el entorno de Cobos, quien ya estaba trabajando también en paralelo en un anteproyecto de ley en esta misma sintonía.
Mayoría por el Sí
Los Andes consultó a los 13 legisladores nacionales por Mendoza, tanto los que asumirán en los próximos días luego del voto popular del 14 de noviembre, como los que seguirán por los próximos dos años.
Naturalmente, Cornejo y Latorre están a favor. En la presentación del proyecto, Cornejo, diputado que será senador tras estos comicios, sostuvo que fue la historia de Daniel Ostropolsky, reconocido abogado de 71 años que padece de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) y que está bregando por la eutanasia asistida, la que lo llevo a “entender la necesidad de que quienes sufran una enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante, puedan solicitar la prestación de ayuda para morir dignamente”.
La Diputada, por su parte, aseguró que “la ley establece una reglamentación, con requisitos básicos a verificarse a través de la comisión de asistencia y análisis médicos donde el paciente plantea su voluntad”.
Pamela Verasay, senadora radical que ahora será diputada, sostuvo que acompañará el proyecto. “La propuesta busca las mejores condiciones para que enfermos terminales, que ya no pueden valerse por sí mismos, incurables o con sufrimientos graves tengan un deceso digno, respetando la libertad de elegir, lo cual es un derecho personalísimo. Esta ley es un debate que tenemos pendiente y que algunos países han saldado como Bélgica y España, y en algunos estados de los Estados Unidos”, dijo a Los Andes.
Julio Cobos será diputado, pero esta semana aprovechará para presentar un proyecto de eutanasia asistida (con algunas variantes) en el Senado. “Es un tema de alta complejidad que trasciende lo partidario y debe darse en el marco de un profundo debate, donde la opinión de los profesionales de la salud es fundamental! Es un problema que debemos tratar, y se dio un paso grande cuando se sancionó la ley de muerte digna, o eutanasia pasiva”, marcó a este medio.
También sostuvo que su proyecto ingresará en Senadores, “con diferencias en técnicas legislativas, pero con objetivos similares, como lo es el derecho a una muerte digna”.
Lisandro Nieri, que reemplazará a Cornejo como diputado, también está a favor de la eutanasia asistida, aunque prefirió no dar mayores declaraciones a este medio, ya que indicó que ha optado por “cerrar el capítulo del Ministerio hasta el ultimo día” y que no es su intención entrar en un “doble rol”. El ministro de Hacienda acompañó a los legisladores en la presentación del viernes en el Comité Radical, y por más que no participó de las fotos institucionales, votará a favor si se da la situación.
Mariana Juri, senadora nacional electa, también votará por la afirmativa. “Buscar las mejores condiciones para que enfermos terminales, incurables o con sufrimientos graves tengan el mejor deceso posible. Ese es el espíritu del proyecto de ley que busca equilibrar libertad con dignidad humana”, dijo en Twitter. En tanto, agregó a Los Andes que buscarán “generar el espacio para que se debata con responsabilidad”.
Desde el peronismo, la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti ya se había pronunciado a favor. En el debate de candidatos en Canal 9, sostuvo que está a favor de discutir una ley de eutanasia en el Congreso. “Creo y respeto mucho a las personas que deciden terminar con el propio dolor de su cuerpo. Incluso se transforman muchas veces en espiritual esos dolores prolongados. Estoy a favor”, expresó.
En consonancia, la diputada Marisa Uceda también está a favor. Si bien desde su entorno destacaron que aún no ha visto el proyecto, “está a favor de una ley que reconozca el derecho a la muerte digna”.
En contra
En el espacio del PRO, dentro de Juntos por el Cambio, las posiciones son negativas. El diputado Omar De Marchi declaró a Los Andes que no está de acuerdo con la eutanasia y marcó que si bien “es un tema muy delicado, porque cuando se personaliza la discusión adquiere forma humana en el rostro de algún amigo que sufre, la tarea de legislar debe ser siempre en abstracto y en el marco de un contexto”.
“Autorizar la muerte, mal llamada digna, es asumir una condición humana superior para terminar nada menos q con la vida de una persona. Yo estoy siempre a favor de la vida”, expresó.
También planteó que “no podría haber peor oportunidad para plantear la Eutanasia que en el actual contexto argentino, lleno de frustración y angustia”, y que “discutir este asunto en este momento es funcional a la distracción que el kirchnerismo necesita para sobrellevar el rumbo errático de su gobierno”.
Álvaro Martínez, presidente del PRO local y diputado nacional electo, fue en la misma línea que De Marchi. “En principio no estoy de acuerdo con la eutanasia. Siempre hemos estado a favor de la vida. Me parece igual que es un tema que hay que analizarlo y evaluarlo”. Además planteó que los argentinos “nos están planteando otra cosa. Habría que ver la oportunidad de cuándo tratarlo”.
Por otro lado, Eber Pérez Plaza adelantó a Los Andes que no está a favor de la eutanasia asistida, y que llegado el caso de votar, podría abstenerse o votar en contra.
En duda
En tanto, Adolfo Bermejo, quien asumirá en los próximos días como diputado, dijo que esperará el proceso de análisis del tema, para “escuchar a especialistas, profesionales y familiares”. En diálogo con Los Andes, sostuvo que escuchó las declaraciones del doctor Ostropolsky y señaló que “han sido conmovedoras y muy fuertes”.
Si bien no se pronunció, hay que destacar que Bermejo votó a favor del proyecto de Muerte Digna (que permite a los pacientes con enfermedades terminales -o a sus familiares- negarse a recibir un tratamiento para permanecer con vida en caso de que su condición sea irreversible), cuando era senador nacional en 2012.
La otra diputada electa en duda es la peronista Liliana Paponet, quien sostuvo que primero deberían abordar temáticas como el fortalecimiento de los cuidados paliativos. “Una persona que transita una enfermedad terminal jamás debería tomar una decisión condicionada, y para eso es necesario que pueda acceder a distintos tratamientos que le aseguren vivir sin dolores. Ese es el primer paso que debemos dar”, expresó.
También marcó que le gustaría presenciar un debate más profundo sobre algunos argumentos, como la “autodeterminación de una persona adulta que quiere dejar de padecer una enfermedad terminal”, el cual le parece “un gesto humano y de respeto”; así como también “analizar el impacto que podría tener en el paradigma médico su implementación y la manera en que abordamos estos casos”.
“Escuchar a los académicos, organizaciones de la sociedad civil y personas será determinante para que los y las legisladoras podamos tomar una decisión con una mirada integral”, finalizó.