El megajuicio que afronta el juez federal Walter Bento, acusado de liderar una asociación ilícita que otorgaba beneficios procesales a detenidos a cambio de dádivas, tuvo otra jornada importante este jueves. Al comienzo de la audiencia el fiscal Dante Vega se defendió del pedido de recusación que presentó ayer el abogado Luciano Ortego, uno de los imputados como organizadores de la banda, y luego el Tribunal Oral Federal N°2 tras un largo cuarto intermedio, decidió por unanimidad ratificarlo al frente de la causa.
Las juezas Gretel Diamante, Carolina Pereira y Eliana Rattá se expidieron por el pedido de recusación contra el fiscal Dante Vega, que presentó ayer el abogado Luciano Ortego, acusado como uno de los organizadores de la banda junto a su colega Jaime Alba y al despachante de aduanas asesinado, Diego Aliaga.
Según el letrado, el fiscal “no puede garantizar objetividad” en el proceso judicial y aseguró que formó un “esquema delictivo” junto a los abogados Lucas Lecour y Sergio Salinas, quienes oficiaron años atrás como defensores del narco financista Walter Bardinella Donoso (acusado también como miembro de la banda) y con los que comparte domicilio legal actualmente. Además, según Ortego, ellos y el “testigo estrella” Diego Barrera (sindicado como autor del homicidio de Aliaga) fueron los que lo comprometieron en la causa.
Entonces, al inicio de la jornada Vega dio los argumentos ante el tribunal para que no lo aparten de la causa, entre ellos varios antecedentes de rechazos a otras recusaciones presentadas por Bento durante la instrucción. Finalmente, tras una hora de deliberación, las juezas decidieron ratificarlo por unanimidad.
En principio Vega cuestionó los “inconvenientes” que han presentado durante el debate algunos abogados que se defienden solos o en conjunto con otros, como es el caso puntual de Ortego. “Es la confusión entre los límites de la defensa material y la defensa técnica, que se evidenció en el planteo que se hizo en mi contra en el día de ayer”, dijo.
“Esta confusión se advierte cuando un imputado ejerciendo su defensa material en la indagatoria, porque es abogado, interpone una recusación y el abogado de él advierte esto, y luego de una pausa adhiere al recurso impuesto por su defendido. Entonces esta adhesión del defensor técnico revela esta confusión entre defensa técnica y defensa material”, sostuvo.
Vale decir que el miércoles permanentemente se “pisaron” Ortego y su abogado técnico, Juan Villegas. En algunas ocasiones el defensor se opuso a contestar preguntas de la fiscalía, pero el propio imputado lo interrumpió, rechazando lo que decía. Incluso la jueza Diamante llegó a decir que prevalecía la palabra del propio imputado que su codefensa para ordenarlos.
Luego de esto, Vega desmembró “este nuevo ataque con respecto a mi actuación como fiscal de esta causa en relación a la objetividad” y aseguró que “no es novedoso” el planteo de un supuesto beneficio otorgado al narco Bardinella Donoso con un pedido de eximición de prisión, ya que Bento intentó apartarlo en el año 2021 con ese argumento y no lo logró.
“Walter Bento y Marta Boiza mencionan la actuación mía en relación a Bardinella Donoso, acusando supuestamente mi falta de objetividad y ese planteo fue rechazado por el juez federal el 21 de abril de 2021, por la Cámara Federal el 5 de mayo de 2021 y por la Cámara Federal de Casación Penal, que no hizo lugar a la queja el 7 de marzo de 2022. O sea, cinco jueces rechazaron el planteo al comienzo de la instrucción de este trámite”, enumeró Vega.
“A pesar del rechazo de la recusación, Bento ha insistido una y otra vez en este tema de Bardinello Donoso en distintos escritos defensistas. Y luego cuando el expediente pasó a esta etapa se interpuso una nueva recusación en mi contra con este mismo arguemento, ya ante este tribunal. Ese recurso fue apoyado por Marta Boiza, sus hijos y los abogados Angeletti. Fue rechazado por este tribunal que me está escuchando en mayo de 2023″, manifestó.
Y aseveró: “A los cinco jueces que antes intervinieron a lo largo de la instrucción ante los planteos de Bento, se suma este tribunal que me está escuchando”.
Luego, aseguró que el planteo del domicilio legal que trajo a colación Ortego, no tiene asidero porque las juezas rechazaron la “intención de sumar como prueba el domicilio fiscal y creo que esto sigue la misma suerte”.
“Con respecto a los libros de mi autoría, no sé francamente qué libro se citó. Y tampoco esto creo que puede ser un elemento que tenga que ver con mi objetividad. No voy a decir nada sobre esto”, consideró.
Por otro lado descartó la idea de que haya llegado a este juicio con la “idea de defenderme”, como también deslizó Ortego en su indagatoria. “Tampoco es nuevo esto. Esta línea de afirmar que yo estoy en el juicio para defenderme, ya la esgrimió el abogado Alba en un escrito en mi contra rechazado por el tribunal oral, en el cual dijo que yo estoy interesado en venir a este juicio porque quiero defender mi cargo, mi libertad y mi patrimonio”, sostuvo.
“Decir que he comenzado a defenderme y frases como estas, no hacen a la cuestión de la objetividad mía como fiscal. No creo necesario aclararlo, no es una cuestión personal sino institucional. Pero lo menciono porque va en esa dirección. Los letrados lo afirmaron en otros escritos también rechazados. Por eso pido a este tribunal que rechace la recusación”, completó Vega y las juezas le dieron la razón una hora más tarde.
Vale decir que para la defensa del juez Bento, “estuvo mal planteada la recusación” de Ortego y era lógico que no prosperara. A pesar de los embates del magistrado contra el fiscal en sus declaraciones, durante el juicio decidieron no optar por ese camino y se plegaron a la estrategia de denunciar que varios imputados fueron obligados a hablar bajo “torturas”. El tribunal ayer desistió de darle curso a esas situaciones.