Máximo Kirchner en el acto del Día de la Lealtad: “Si el Estado nacional no puede planificar, menos van a poder las familias argentinas”

Con la lectura de un documento que contempla una serie de puntos a modo de programa político, empezó en Plaza de Mayo el acto evocativo del Día de la Lealtad, convocado por Pablo Moyano y grupos aliados de la CGT, las dos CTA, La Cámpora y sectores kirchneristas. “Cristina Presidenta”, fue la principal consigna cantada por los manifestantes. “Ese es el sentir de esta plaza”, dijo Hugo Yasky, el primero de los oradores.

El dirigente sindical Omar Plaini abrió pasadas la 16 horas el acto en conmemoración del 77 aniversario del 17 de Octubre con la lectura del documento consensuado entre las más de cien organizaciones convocantes. Después siguieron Yasky, dirigente de una de las CTA, y Hugo “Cachorro” Godoy, de la otra CTA, y el jefe de La Cámpora, el diputado nacional Máximo Kirchner.

Una multitud se empezó a reunir al mediodía sobre la avenida 9 de Julio, donde las distintas columnas de manifestantes enfilaron hacia la Plaza de Mayo. Además del sindicato de camioneros, marcharon los obreros de SMATA y la UOM, reunidos todos en el Frente Sindical para el Modelo Nacional. También marcharon los gremios de la Corriente Sindical, referenciados en el diputado nacional kirchnerista, José Palazzo. La columna de La Cámpora, junto al PJ bonaerense, fue de las más voluminosas y llegó a la Plaza cubriendo casi toda la extensión de la Diagonal Norte.

Entre los puntos del documento se destaca la necesidad de avanzar en los controles de precios, la reforma del sistema financiero y una política agresiva de sustitución de importaciones.

El discurso de Máximo Kirchner

“Gracias por honrarme al dejarme hablar acá”, dijo Máximo Kirchner al iniciar su discurso. “Aquí advertimos que Macri no tenía un plan de gobierno. Era un verdadero plan de negocios, donde lo que menos se contemplaba eran la educación, la salud, y la seguridad de los ciudadanos: destrozaron el Estado”, criticó el jefe del peronismo bonaerense.

“Los 45 millones de argentinos fueron los que cancelaron la deuda con el FMI”, afirmó, en referencia al pago hecho al organismo internacional durante la presidencia de Néstor Kirchner.

El diputado nacional criticó a las empresas exportadoras cerealeras. “Hubo que hacerles un precios especial porque sino, no liquidaban los granos. Les pido que tengan el mismo grado de conciencia de los empresarios cuando pidan por sus intereses”. “¿Vieron esa deuda en sus barrios, en mejores hospitales? Nada.

“El tema de la deuda no está solucionado. La curva de vencimientos es un verdadero problema para quien gobierne. ‘No importa, habrá que negociar de nuevo’, me decía. “Sin odio, con amor y fortaleza”, arengó Máximo Kirchner.

”Nunca vamos a poder planificar el país que deseamos. Y si el Estado nacional no puede planificar, menos van a poder planificar las familias argentinas. La Argentina necesita un respiro, no necesita lecciones de economistas, de ideas obsoletas, arcaicas y que sólo benefician a unos pocos”, indicó.

También le dejó un mensaje a la CGT, que en su acto reclamó espacios en las listas del oficialismo para el 2023. “De cara a lo que viene, los desafíos por delante, no es ver quién tiene lugar en las listas. Con la situación que se vive… juntarse a pedir una banca. Después no aparecen cuando hay que votar contra los fondos buitres”, criticó.

“Se avecinan tres flexibilizaciones: laboral, impositiva y ambiental”, pronosticó y pidió defender los recursos naturales y reforzar la intervención del Estado.

“Mauricio Macri fracasó porque no estuvo a la altura de lo le reclamaba la historia. Maleducado”, dijo Máximo Kirchner. “Siempre con ustedes y a disposición”, concluyó. El cierre finalmente quedará a cargo de Mario “Paco” Manrique, por lo que Pablo Moyano no dará un discurso, pese a lo anunciado.

La CGT en Obras

Con consignas distintas a la de la convocatoria a la Plaza de Mayo, el grueso de la CGT celebró el Día de la Lealtad en el estadio porteño de Obras. La central obrera anunció la creación del Movimiento Político Sindical Peronista, instrumento político con el cual bregará por espacios en las listas del oficialismo para el 2023.

“Se nos dijo que éramos parte del Gobierno, pero la CGT no está en los lugares en los que se definen las políticas”. La frase del triunviro de la CGT, Héctor Daer, resumió el ánimo de los cinco mil asistentes.

Daer, integrante del triunvirato que conduce la central obrera, cerró el acto con comentarios sobre los próximos pasos políticos de la CGT: “Necesitamos construir un espacio político que tenga la capacidad de resolver los problemas que aquejan a los argentinos”.

“No queremos romper ningún frente. Queremos un gobierno con los trabajadores adentro”, aclaró Daer, para despejar dudas sobre el apoyo al gobierno y la pertenencia al FdT.

Desde el palco de la CGT se dispararon críticas a Maurcio Macri y Juntos. “Cómo no nos va importar meternos en política si todo lo que viene es sobre el lomo de los trabajadores. Hablan de reforma laboral, flexibilizar leyes. No lo vamos a soportar”, dijo el titular del sindicato de la Sanidad.

Antes de Daer, el influyente dirigente de la UOCRA, Gerardo Martínez, había planteado la necesidad de que la CGT tenga opinión en las definiciones del oficialismo: “Queremos tener diputados, senadores y estar en la mesa en la que se toman decisiones”, expresó.

Martínez es uno de los impulsores de la “nueva 62 Organizaciones” creada por la CGT. Aludió a la necesidad de recuperar protagonismo dentro del FdT. “Necesitamos un protagonismo político y territorial. No estamos contentos con lo que está pasando en la Argentina”, dijo Martínez. Pero de inmediato se encargó de apuntarle a Macri: “Sabemos que la gestión anterior, la del Gato, nos metió en este empréstito injusto. Pido que silbemos al FMI. Nadie pudo discutir ese empréstito, que no es joda”.

“No queremos ser convidados de piedra. Nuestros dirigentes no tienen protagonismo en los debates democráticos del país”, insistió Martínez, que días atrás dijo en el coloquio empresarial de IDEA que no alentaba la “industria del juicio laboral”.

Martínez le dejó un mensaje al Gobierno: “Pretendemos estabilidad económica porque es lo que garantiza el poder adquisitivo del salario. No nos gusta negociar salarios por el 100 por 100 y que al día siguiente se esfuma. Que el Gobierno y la oposición tomen nota”.

“Queremos un peronismo no como el de hoy, en el que hay gente revolviendo la basura”, reclamó el dirigente de los estatales, Andrés Rodríguez. “Queremos cargos. Pero no queremos más cargos a dedo”, dijo, plegándose al clamor por las candidaturas que dominó el acto en Obras.

Sebastián Maturano, de la Juventud Sindical, le puso nombre a la interna de la CGT: “¿Qué tiene La Cámpora para ocupar más cargos que nosotros en la conducción del Partido Justicialista?”, se preguntó.

Armando Cavalieri, de 86 años y reelecto al frente de los empleados de Comercio, abrió el juego de la interna peronista al entrar al acto. Dijo que el gobierno perdió la confianza. “Es necesario revalidar esa confianza en las urnas y que surja un líder”, propuso.

José Luis Lingeri, anfitrión del acto de la CGT, dejó un discurso de unidad, sin reproches al gobierno nacional ni a los grupos políticos y sindicales que convocaron a la Plaza de Mayo. Carlos Acuña, también integrante del triunvirato conductor de la CGT, aprovechó para expresar su candidato a Presidente 2023: “Me gustaría que Massa sea candidato. Está haciendo las cosas bien y calmó un poco las aguas. Es mucho mejor que los otros economistas que tuvimos anteriormente”, dijo.

Entre el Obras de la CGT y la marcha a Plaza de Mayo, el presidente Alberto Fernández encabezó el acto por la finalización de una autopista bonaerense. Sergio Massa estuvo a su lado, igual que el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, y el gobernador Axel Kicillof. “Lo que tenemos que hacer los que nos sentimos sus herederos es no claudicar en el ideario de Evita y Perón”, dijo como reflexión del Día de la Lealtad. Fernández decidió ser prescindente de los distintos actos por el 17O.