En el marco de las gestiones para postergar las elecciones por la pandemia del coronavirus, el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro solicitó una reunión con las autoridades de la Cámara Nacional Electoral (CNE) para analizar los protocolos sanitarios que se aplicarán en los próximos comicios cuyo cronograma, aclararon en Casa Rosada, “se encuentra vigente”.
Según informaron fuentes oficiales, De Pedro le envió una nota al presidente de la CNE, Santiago Corcuera; al vicepresidente Raúl Bejas y al juez Alberto Ricardo Dalla Vía, para organizar una reunión de trabajo. El encuentro sería el próximo jueves 29.
El objetivo de la Casa Rosada es “avanzar en las cuestiones operativas durante las elecciones que se desarrollarán este año en el contexto de pandemia”.
En paralelo, continúan las conversaciones con distintos sectores políticos para analizar una eventual postergación por un mes de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) y las Elecciones Legislativas ante el crecimiento de contagios en el contexto de la segunda ola de coronavirus que atraviesa el país.
Las conversaciones son encabezadas por De Pedro, quien remarcó que todo apunta a establecer los parámetros para “concretar las elecciones nacionales de manera segura durante una pandemia que provoca mucha incertidumbre”.
La intención del Gobierno nacional es que, una vez concluida la pandemia, se pueda “generar un ámbito de debate para evaluar reformas estructurales que mejoren el sistema electoral argentino, y se reconozca que es el Congreso el único ámbito habilitado por la Constitución para innovar en materia electoral”, según destacó la secretaria de Asuntos Políticos, Patricia García Blanco.
El Gobierno busca consensos para posponer un mes las PASO con la intención de evitar la aglomeración de gente en los meses de invierno, como para dar tiempo a que el plan de vacunación alcance a cubrir a toda la población de riesgo.
Pero para ello se requiere un acuerdo político, ya que las leyes electorales necesitan mayorías calificadas de 129 votos en Diputados y de 37 en el Senado (la mitad más uno de los miembros de cada Cámara), por lo que hace falta un consenso entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio y el resto de las fuerzas políticas con representación parlamentaria.