El Senado provincial acordó, entre los diferentes partidos y espacios que lo conforman, modificar el modo de cobro del “Ítem desarraigo”, que perciben aquellos legisladores que viven a más de 100 kilómetros del edificio de la Legislatura, en la Capital provincial. Desde que empezó la pandemia y comenzaron a realizarse sesiones virtuales, cada senador que percibió este ítem recibió un monto de entre $93.640 y $133.770 en total hasta febrero, mes donde volvieron las sesiones presenciales. En total son 10 los legisladores que lo cobran, por lo que el monto total rondó el millón de pesos.
Los cambios a este ítem se resolvieron entre el lunes y martes, en base a una presentación que realizó el senador del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), Lautaro Jiménez, quien en enero había solicitado que no se pagara el aporte, teniendo en cuenta que no todos los senadores habían viajado a la Capital para asistir a las sesiones, y seguían su trabajo legislativo a distancia. Además, exigió que se devolviera el dinero que se había destinado en ese concepto, punto que no fue aceptado por el resto de los bloques.
De esta manera, en la reunión de Labor Parlamentaria se acordó que solamente cobrará el ítem desarraigo el senador que, viviendo a más de 100 kilómetros, viaje a la Capital para asistir a las sesiones o reuniones de comisiones. En este sentido, se ratificó que, por más que sigan la sesión por su despacho vía virtual, siempre que esté en el edificio legislativo, percibirá el dinero correspondiente. Por el contrario, si no están en la Legislatura, no lo recibirán.
La diferencia radica en que hasta este mes, los 10 senadores que tienen domicilio a más de 100 kilómetros, cobraron este monto, sin importar si siguieron o no las sesiones desde sus comunas, sin viajar a la Legislatura.
No obstante, desde la Vicegobernación destacaron a Los Andes que una vez que volvieron las sesiones semipresenciales, a fines del 2020, “prácticamente todos los senadores que tienen este ítem en sus bonos de sueldo estuvieron viajando a la Capital, ya sea por Sesiones de Acuerdos, o para asistir, al menos desde su despacho en el edificio, a las sesiones o reuniones de comisiones”.
En este sentido, cabe destacar que los senadores viajaron a la Capital para tres sesiones de acuerdos, aquellas en las que la presencialidad es obligatoria, para aprobar o no pliegos de magistrados. De hecho, en medio de la pandemia, las mismas se realizaron el 30 de junio, el 11 de agosto y el 1 de septiembre. El resto, se han llevado a cabo luego del mes de febrero, cuando la Cámara Alta ya había reglamentado la presencialidad por la baja de casos de coronavirus que se registró durante nuestro verano.
Ahora quedará esperar la resolución que será escrita en la presidencia del Senado, con la firma de Mario Abed. Según señalaron desde la Cámara Alta, desde el mes de junio se pondrá en funcionamiento este nuevo sistema, que es similar al de la Cámara de Diputados, en el cual “quien no viaja a la Capital, no cobra el ítem”.
Por otro lado, también defendieron el ítem desarraigo. tanto desde el oficialismo como de la oposición, al indicar que “la mayoría de los legisladores afectados tienen alquileres en el Gran Mendoza, ya que por lo menos suelen quedarse 4 o 5 días a la semana por sus reuniones o sesiones, y esos alquileres suelen ser por dos años, por lo que no los pueden darlos de baja”.
En tanto, quien deberá “controlar” el pago o no de este ítem será el secretario legislativo, David Sáez, quien es el que lleva las asistencias de los senadores. Además, se informó que el pago será semanal, es decir que el senador cobrará todo el monto previsto siempre y cuando tenga participaciones presenciales en todas las semanas del mes.
Los senadores que cobran el ítem son Samuel Barcudi, Cecilia Canizzo, Lucas Quesada y Mauricio Sat, todos ellos de San Rafael. Además lo perciben las malargüinas Silvina Camiolo, Gladys Ruiz e Hilda Quiroga, el alvearense Leonardo Viñolo, el paceño Gustavo Pinto y el sancarlino Marcelo Romano.