Julio Cobos fue uno de los mendocinos que más cerca estuvo de Néstor Kirchner, de cuya imprevista muerte se cumplen hoy 10 años. El ex gobernador, desde el radicalismo, fue el elemento que le dio forma final a la Concertación Plural que el santacruceño diseñó para ampliar la base de sustentación de su proyecto político, alianza que se terminó abruptamente aquella madrugada del “no positivo”, el 17 de julio de 2008.
Cobos, hoy en las antípodas del kirchnerismo, que lo considera un “traidor” por haber votado en el Senado contra la resolución 125 en su rol de vicepresidente de Cristina Kirchner, recordó ahora, en diálogo con Los Andes, aquellos tiempos de idilio con el ex presidente cuando él recién asumía la Gobernación en Mendoza.
“La verdad que con Néstor Kirchner tuvimos muy buena relación cuando yo fui Gobernador y él, Presidente”, reconoció el actual senador nacional. Uno radical, el otro peronista, ese “romance” político comenzó en nuestra provincia en marzo de 2004, a tres meses de haber asumido Cobos el gobierno. Fue en un helicóptero que ambos compartieron rumbo al Cristo Redentor, el monumento en la cordillera donde el 13 de marzo de ese año Kirchner y su por entonces par de Chile, Ricardo Lagos, compartieron un acto para celebrar el centenario de ese hito entre ambos países.
A bordo de la nave, Cobos y Kirchner descubrieron en ese entonces afinidades y el “flechazo” originó un acercamiento que derivó en la candidatura a vicepresidente del mendocino tres años después, acompañando en la fórmula a Cristina Kirchner.
Todo terminó mal entre Cobos y los Kirchner, pero antes de eso hubo muchos momentos que compartieron juntos. Entre ellos, el ex gobernador eligió uno a modo de anécdota para recordar al santacruceño y su relación con Mendoza.
“Me parece mejor recordarlo de esta forma. Me invitaron a la asunción de Tabaré Vázquez, en su primer mandato”, empezó a relatar Cobos una anécdota que vivió el 1 de marzo de 2005. “Era Gobernador y estaba haciendo trámites en Buenos Aires. Estaba por volver a la provincia y yo había ido por el día, por lo que me tuve que comprar una camisa para ir a la asunción. Viajamos y me acuerdo que me dijo Alberto Fernández: ´Vamos a la plaza y después vamos y saludamos al presidente. Así que fuimos a la plaza, nos quedamos con la gente que estaba muy contenta. Después obviamente saludamos a Tabaré Vázquez y a la noche me invitó a cenar el Presidente, junto a Cristina y Alberto”.
La anécdota no terminó ahí. Sigue Cobos: “Fuimos los cuatro a cenar. Me acuerdo que después nos fuimos caminando para el hotel los tres, Cristina había vuelto a su hotel. Recuerdo que en esa cena la obsesión de Néstor Kirchner era el poco porcentaje que había sacado en Mendoza (en 2003). Había salido cuarto después de Rodríguez Saá, López Murphy, Lilita Carrió. Entonces me dijo: ‘¿cómo puedo hacer para enamorar a los mendocinos?’. Y le respondí: ‘mirá, a los mendocinos, como somos habitantes de un desierto, nos gustan las obras. Fijate que por eso ganó Rodríguez Saá, porque hizo la doble vía que la inauguró unos días antes de la elección’. Ahí le sugerí empezar la doble vía hacia el Este. Tomé una servilleta, le hice un croquis y le expliqué cómo hacer, aunque sea algunos kilómetros, para ir empezando”.
Según relató Cobos, “el lunes llego a mi despacho y me llaman, creo de Vialidad Nacional, diciéndome ‘mire ingeniero, acá tengo un croquis que me entregó el Presidente de la Nación. ¿Usted me podría explicar bien qué necesita?’. Y así fue cómo surgió la doble vía. Me acuerdo que terminé mi gestión y quedó todo en construcción, toda licitada. Inauguré todos los tramos hasta Santa Rosa, pero después dejamos en marcha la obra hasta Desaguadero”.