El Gobierno provincial informó este lunes que amplió las partidas presupuestarias en $13.344.940.547, en otra muestra del desfasaje entre previsiones de gasto y recaudación que atraviesa la Provincia producto de la inflación.
A través del Decreto 2134, fechado el 16 de noviembre y publicado en el Boletín Oficial este lunes, el Ministerio de Hacienda y Finanzas anunció un aumento de $12.677.639.084 por “la necesidad de incrementar el presupuesto de erogaciones, como contrapartida de una mayor recaudación estimada por sobre el Cálculo Definitivo de recursos del presente ejercicio”.
Entre los considerandos, el Ejecutivo destacó que “el Ministerio de Economía de la Nación estimó para el ejercicio 2022 a través de las pautas macrofiscales expuestas en la Ley de Presupuesto del Gobierno Nacional para el Ejercicio 2022 una variación interanual del IPC de 33%”, pero conforme al último informe publicado del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos “la inflación acumulada al mes de octubre para el corriente ejercicio asciende a 76,6%”.
Entonces remarcan que “producto de una inflación mayor a la prevista, la recaudación nominal estimada para el Ejercicio 2022 será superior a la prevista en el Cálculo de Recursos de Origen Provincial y Nacional” y por esto tomaron la determinación de ampliar las partidas para cubrir las necesidades presupuestarias de diversas áreas de gobierno.
Además, con el Decreto N° 2165 fechado el 18 de noviembre, el Gobierno anunció otro incremento de $667.301.463,30 por “pedidos de refuerzos de partidas de personal en distintas jurisdicciones”.
“Existen saldos disponibles en el Ministerio de Hacienda y Finanzas, los cuales pueden ser destinados a cubrir las necesidades planteadas”, afirmaron.
Los motivos de los constantes aumentos
El ministro de Hacienda, Víctor Fayad, explicó, ante la consulta de diario Los Andes, las razones de estos cambios. El funcionario señaló que, cuando elabora los cálculos del presupuesto del año siguiente, el Gobierno provincial tiene la obligación legal de respetar las “pautas macrofiscales” que fija la Nación. Dichas pautas indicaban, a setiembre de 2021, que la inflación de 2022 iba a ser del 33%.
Eso no ocurrió y no es ninguna novedad. El cálculo que manejan actualmente las autoridades provinciales elevan el cálculo de la inflación “real” del 2022 al 92%. De allí surgen las necesarias modificaciones contables en el Gobierno.
La enorme diferencia entre el cálculo y la realidad obliga todo el tiempo a ajustar las cuentas e incluso a explicar adentro del gobierno cuál es el mecanismo. “Tenemos que explicarles a todos los ministros que no van a recibir solo el aumento de la inflación subestimada y que, a medida de que transcurre el año, cuando la inflación quede como una mentira, se ajustarán las partidas”, explicó Fayad.
Y agregó: “En este contexto primero se agota el presupuesto de recursos, en junio o julio ya se gastó todo. Y generalmente hacia fines de año, lo que hay que hacer es darles (a los ministros) nuevas partidas demostrando que se recaudó más de lo presupuestado”. Esto último lo certifica un arqueo de la Contaduría General de la provincia, indicó también Fayad.
Debido a esta secuencia, el grueso de las ampliaciones de presupuesto comenzaron a verse en el segundo semestre, entre julio y agosto; y se incrementaron mucho en el último trimestre del año.
Fayad dice que esta situación genera una burocracia enorme. “Es un dolor de cabeza, la mitad de las resoluciones que firmo son por mayor recaudación”, afirmó el ministro de Hacienda. Y recalcó el argumento de que estos problemas son “consecuencia de la subestimación de la inflación por parte del Gobierno nacional”.
Insistió también el funcionario en que los cambios no reflejan una “mayor recaudación”, como indica la oposición, porque los gastos también han sufrido el mismo impacto. En particular, la paritaria con los gremios estatales, que reflejó la inflación real de 2022 con aumentos salariales por encima del 90%.