El Gobierno justificó el desplazamiento de Diana Mondino de la Cancillería en la decisión de la ex funcionaria de “mantener el voto histórico de la Argentina sobre el embargo a Cuba sin consultar” a la Presidencia.
“Estamos viendo todavía cómo fue el proceso interno en Cancillería que derivó en este voto”, precisó un influyente funcionario con despacho en Casa Rosada en declaraciones a un grupo de periodistas acreditados.
Al respecto, admitió que fuera del Ministerio de Relaciones Exteriores nadie en Presidencia sabía que se aproximaba la votación de la ONU y que Mondino no consultó previamente al respecto ni al presidente Javier Milei ni a la Jefatura de Gabinete.
La misma fuente desechó de plano las versiones de que Mondino votó de esa forma para acelerar su desvinculación de la gestión de Milei: “Nada que ver, Diana quería seguir siendo canciller”, sostuvo.
Consultado sobre si la postura de Mondino se justificaba en el hecho de que, si la gestión libertaria está a favor del libre mercado y comercio, en consecuencia, debería estar en contra del embargo a Cuba, el dirigente respondió que “no todo es blanco o negro”.
De ese modo, dio a entender que el Gobierno, ante esa disyuntiva, privilegia más su rechazo a las dictaduras y su alineamiento internacional con Estados Unidos e Israel.
También desestimó que el voto favorable a la isla caribeña pueda justificarse con la cuestión Malvinas, ya que Cuba actualmente preside el Comité Especial de Descolonización de la ONU y tal vez convenía no tensionar la relación con la isla.
“Votes como votes en la ONU, la cuestión Malvinas está trabada y seguirá trabada”, consideró en ese sentido.
No obstante, en la gestión libertaria no mostraron grandes resquemores con Mondino y la calificaron como una dirigente “valiosa”, al deslizar que pese a ese tropiezo no descartan que la excanciller siga, con otro rol, dentro de la estructura de La Libertad Avanza (LLA).
No obstante, el futuro de Mondino es incierto y las fuentes consultadas no descartaron que pueda ser candidata legislativa el año próximo, aunque aclararon que “todavía falta mucho para armar las listas” de las elecciones legislativas de 2025.
Sobre quién sucederá a Gerardo Werthein, el designado canciller, al frente de la Embajada de los Estados Unidos, señalaron que se esperará primero a que se realicen las inminentes elecciones presidenciales de ese país.
“Vamos a esperar y de acuerdo con quién gane elegiremos a un embajador que tenga el mejor perfil posible para lograr un vínculo estrecho con el nuevo presidente”, precisó el funcionario.