Con la presentación del proyecto del Presupuesto 2025 y la ley Impositiva, el Gobierno de Alfredo Cornejo señaló que seguirá en la senda del “equilibrio fiscal” y el superávit financiero, en lo que corresponderá el segundo año de gestión del mandatario radical.
No obstante, como dato importante en el proyecto, el ministro de Hacienda, Víctor Fayad, presentó este miércoles reformas en la fórmula de cálculo del Impuesto Automotor, que tiene el objetivo de “eliminar” una serie de distorsiones que se explicitaron durante este 2024, cuando se implementó el “topeo” en vehículos menores a los $15 millones de valor, con un 159% de aumento, y una inflación acumulada que terminó siendo del 216%.
En este caso, Fayad aseguró que propone reemplazar el esquema de topes de aumento utilizado en los últimos años, “por una escala de alícuotas progresivas que varían según el avalúo del vehículo”.
En este sentido, en vez de tener una alícuota del 3%, como se tuvo en este 2024 para el cálculo del Impuesto Automotor, la misma será progresiva desde el 1,5% (para autos de hasta $5,7 millones de valor), en una escala progresiva -según el valor del vehículo- hasta el 3% de alícuota, que contemplará todos los vehículos que sean mayores a los $70,3 millones.
Además, aseguraron que “este cambio permitirá reducir las inequidades generadas por los topes de aumento ya que, en 2024, muchos vehículos con avalúos similares pagaban impuestos muy dispares, dependiendo de si estaban sujetos a dichos topes o no”.
Por ejemplo, en casos testigos de este 2024, un Peugeot Allure 1.6 modelo 2020, al estar “topeado” por tener un valor de mercado menor a los $15 millones, se pagó por ese bien un impuesto automotor de $141.927; mientras que por el mismo vehículo, pero modelo 2021 (con valor de mercado superior al tope, de $15,1 millones), se debió abonar un 220% más, con una boleta de $454.200.
En otro orden, un Chevrolet Cruze modelo 2021 4 puertas, quedó “dentro” del topeo (por tener un valor de mercado de $14,5 millones), y se debió abonar una boleta de $300.130; mientras que por el mismo vehículo, mismo modelo, pero 5 puertas (con un valor de $15,7 millones), se debió abonar $471.396.
En este sentido, Fayad sostuvo que “si bien se observa una baja en terminos reales, que se explica por los límites del impuesto automotor por debajo de la inflaicón, pero no aumentó la mora”.
“El objetivo es modificar el alivio fiscal que tenían los topeos, con una disminución de alícuotas”, señaló Fayad, quien en este sentido sostuvo que el efecto recaudatorio “será neutro, porque producto de los topeos hay muchos vehículos que han pagado en este 2024 una alícuota menor del 3%”, aclaró.
A la caza de las construcciones clandestinas
Por otro lado, para determinar el valor de la tierra del impuesto inmobiliario, informaron que se continuará utilizando la metodología introducida en 2024, según la cual se utilizan métodos de valuación masiva surgidos del Observatorio del Mercado Inmobiliario de Mendoza desarrollado en el ámbito de la Dirección de Catastro.
Para 2025, se adecuaron los tramos de avalúos para calcular el impuesto, lo que permitirá obtener “una mejor distribución de las parcelas en las distintas categorías”. El monto fijo, en este sentido, será de $30.100 para el impuesto mínimo.
Además, se incorporó una nueva fórmula de cálculo del impuesto, que combina montos fijos variables según categorías y alícuotas crecientes. Este enfoque “elimina los saltos bruscos en el monto a pagar al cambiar de categoría, lo que asegura una mayor equidad tributaria para los contribuyentes de la Provincia”.
Por otro lado, Fayad dijo que habrá “actualizaciones de superficies no declaradas en el impuesto inmobiliario”, que son unos 18,5 millones de m2 “que no estaban declarados” y que ahora deberán pagar el impuesto con sus actualizaciones.
Otra novedad que marcaron es que se introducirá un “10% de descuento adicional en los impuestos patrimoniales para contribuyentes cumplidores con el fisco provincial”. Esto significa que el descuento en el pago de estos impuestos podrá llegar hasta el 35% si el contribuyente paga la cuota anual, si el objeto estuvo al día en sus impuestos en 2023 y 2024 y si el contribuyente no tiene deuda exigible al 31 de diciembre de 2024.
