El gobierno provincial avanza hacia la instalación de los primeros inhibidores de señal en las cárceles de Mendoza. La prueba se lleva adelante en el área de máxima seguridad del Complejo Almafuerte II, en Cacheuta, que fue inaugurada este mediodía por el gobernador Rodolfo Suárez. Cabe recordar que se trata de una iniciativa que recogió de Luis Petri, como excandidato a la gobernación.
Del acto participaron también el ministro de Seguridad, Raúl Levrino, y el director del Servicio Penitenciario, Eduardo Orellana. Según manifestó el mandatario provincial en conferencia de prensa, actualmente se encuentran en una etapa de evaluación con una empresa argentina y luego avanzarán hacia la licitación propiamente dicha.
“Vamos a comenzar en el pabellón de máxima seguridad. Con este proceso licitatorio iremos avanzando a medida que veamos el funcionamiento, porque no puede alterar el sistema de seguridad propio de la cárcel y el personal”, explicó.
Por su parte, Levrino comentó que los inhibidores deben ser colocados “en punto por un pabellón determinado” para evitar inhibir a todo el sistema carcelario, por eso demanda un estudio muy detallado para su instalación. En ese sentido manifestó que buscarán avanzar con el sistema en otros pabellones, incluidos los de Almafuerte I.
Suárez aseguró que “no existe en Latinoamérica una cárcel de esta naturaleza” y manifestó que el complejo no solo “reúne las condiciones de máxima seguridad” sino que además “es impresionante la calidad de las instalaciones”. Agregó que a la infraestructura y tecnología de última generación de Almafuerte II se suma la incorporación del data center, “que nos va a permitir tener la información de todo este complejo penitenciario”.
El Gobernador detalló que el sistema “funcionará como un 911 interno del lugar. También vamos a incorporar drones, con el fin de asegurar todo el perímetro”. En los primeros días de octubre serán trasladados los primeros reclusos a las celdas unicelulares.
El complejo tiene una superficie cubierta total de 38.400 metros cuadrados. En total, tiene 986 camas, distribuidas en cuatro cárceles independientes. Todas con acceso a educación, salud, deporte y actividades culturales, además de un Centro Universitario, para que las personas allí alojadas cursen sus estudios superiores.
Almafuerte II cuenta con un sistema de seguridad inteligente que incluye 192 cámaras, dos de ellas con lectores de patente; sensores perimetrales externos; escáner tipo aeropuerto, sistema de identificación biométrica, para apertura de puertas de ingreso, data center, centro de monitoreo, videowall y centro de grabación y almacenamiento de filmación.
Además, fue diseñado con controles electromecánicos a distancia, cámaras y sensores de control de 24 horas, más cámaras de sensores de reconocimiento biométrico. A esto se le agregarán luego los inhibidores de señal telefónica.
