La Cámara de Senadores de la Nación tuvo ayer su primera sesión presencial luego de varios meses, en el cual el país atraviesa y combate la pandemia del coronavirus. Allí estuvo la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, quien presidió la sesión en la que, entre otras cosas, se votó un enérgico rechazo al decreto en el cual el país vecino de Chile avanzó sobre los límites de la plataforma continental argentina, avalados por Naciones Unidas y consagrados por ley el año pasado.
No obstante, más allá de lo estrictamente político, repercutió un accesorio que lució la Vicepresidenta durante la sesión de ayer. Se trata de un cinturón Louis Vuitton modelo Glory, que tiene un costo de U$S 710, que convertido en pesos ronda los $130.000.
En el sitio web de Louis Vuitton describen este accesorio: “Este cinturón reversible LV Glory de 30 milímetros destaca la exquisita artesanía de la casa”, marca el sitio web relevado por diario Clarín.
Además agrega que cuenta con un “diseño reversible con tela Monogram en un lado y piel de cordero suave en el otro, lo que permite dos looks sin esfuerzo. El efecto de guilloché producido por expertos en la hebilla de LV Initials asegura un acabado llamativo”. Se destaca también la hebilla, de herrajes en color dorado, con el logo inconfundible de LV initials.
Sin embargo, un dato importante es que el cinturón actualmente está agotado, por lo que habrá que aguardar para poder adquirirlo.
En esta sesión, Fernández de Kirchner aprovechó para lanzar una breve chicana a Juntos por el Cambio por la ausencia de algunos de sus senadores después de haber reclamado retomar el funcionamiento normal.
“Les informo a todos los senadores que contamos con 62 senadores presentes, de los cuales el oficialismo tiene un senador ausente, otro tiene licencia autorizada por este cuerpo (por José Alperovich) y de los diez ausentes, ocho son de la bancada opositora”, remarcó Cristina.
Fue antes de que el Frente de Todos aprobara, sin apoyo de la oposición, dos decretos presidenciales: el 9/21, que prorrogó las sesiones remotas entre septiembre y octubre, y el 10/21, que restableció la presencialidad. Los decretos fueron avalados con 41 votos afirmativos y 20 negativos.
Los ausentes de Juntos por el Cambio fueron el jefe del interbloque, Luis Naidenoff (contagiado de Covid), Martín Lousteau (CABA), Pedro Braillard Poccard (Corrientes), Oscar Castillo (Catamarca), Gladys González (PRO), Ernesto Martínez (Córdoba), Claudio Poggi (San Luis) y María Belén Tapia (Santa Cruz), y por el Interbloque Federal, su líder, el salteño Juan Carlos Romero. Por el Frente de Todos solo faltó el pampeano Daniel Lovera.
El oficialismo aceptó retomar el funcionamiento presencial luego de que Juntos por el Cambio le enviara una nota a Cristina. “Nos oponíamos por entender que no estaban vigentes las condiciones para continuar con la virtualidad”, argumentó el jefe del bloque PRO, Humberto Schiavoni.
También se dio un evento emocionante, cuando el senador José Mayans resaltó durante su discurso la presencia en el recinto de Esteban Bullrich, que padece ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), una enfermedad que provoca trastornos en el habla. “Me alegra mucho verlo a Bullrich con nosotros. Está pasando un momento duro pero evidentemente tiene fuerza de espíritu, por eso está acá con nosotros”, destacó el formoseño y se desató un aplauso en el recinto, al que incluso se sumó Cristina.
