La Asociación de Trabajadores Estatales (ATE) y la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza vienen teniendo una relación ríspida desde hace meses. El Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM) es quien tiene mayoría de afiliados, pero ahora el gremio estatal empieza a agitar el avispero con intenciones de expandirse a otras comunas, en donde esta disputa no es tan visible aún.
Según datos de la comuna, hay 2600 empleados y empleadas que trabajan allí. SOEM, liderado por el actual concejal oficialista Dugar Chappel, tiene 1.000 afiliados y ATE, 200. También hay 1.200 que no están afiliados a ninguno de los dos grenios.
La disputa por del gremio conducido por Roberto Macho (donde revistan muchos peronistas) por “robarle” afiliados al sindicato cercano al radicalismo se recrudeció luego de que la organización mayoritaria acordara mejoras en diferentes adicionales, como las horas trabajadas los fines de semana para quienes realizan tareas de recolección y un aumento en el ítem del refrigerio, por nombrar algunas.
Ulpiano Suárez, jefe comunal capitalino, aseguró que el reclamo de ATE es político, debido a que dirigentes del peronismo visibilizaron sus reclamos, puntualmente el sábado cuando se desarrolló una asamblea en el ex predio de la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), donde tiene sede la dirección de Servicios Públicos municipal, que terminó con la intervención de la Justicia.
“Hay política en el medio, ha estado el presidente del PJ Guillermo Carmona solidarizándose con ATE, también un concejal, Ernesto Espeche de La Cámpora, solidarizándose, es todo muy llamativo. En el comienzo de la jornada de protesta del sábado pusieron la marcha peronista. Es evidente que hay una acción para posicionarse con respecto al otro gremio con el apoyo de distintos dirigentes del peronismo”, denunció Suárez en diálogo con Los Andes.
“Macho llegó a la Ciudad de Mendoza y a Luján en 2019, justamente donde los intendentes eran precandidatos de Cambia Mendoza”, sostienen desde el municipio capitalino. Hay un hecho clave tras el desembarco de ATE en los pagos de la Ciudad: la recordada reinauguración de la plaza España en setiembre del 2019, en plena campaña electoral.
Rodolfo Suárez oficiaba uno de sus últimos actos como intendente y se disponía a realizar el corte de cintas. Luego de un breve discurso y en medio del saludo de vecinos, apareció un grupo de afiliados de ATE, liderados Roberto Macho, mostrando carteles con reclamos salariales. Todo terminó con Suárez yéndose en medio de insultos cuando los números artísticos aun no pisaban el escenario.
“A partir de allí, se blanquearon las intenciones de ATE de llegar a la Ciudad. Primero fueron contra Rodi y ahora apuntan todos los cañones acá, porque evidentemente hay política en el medio”, agregó el actual intendente.
Si bien ATE recibe menos cuotas sindicales por sus afiliados, éstos están en lugares estratégicos para visibilizar los reclamos: la mayoría son preventores, personas que trabajan en la vía pública. Gran parte de los no afiliados a ningún gremio están en la administración central del edificio municipal, con muy poco apego a las medidas que proponen tanto SOEM como ATE. De hecho, por lo bajo, aseguran que ATE le da visibilidad a reclamos que con el otro gremio pasan inadvertidas: “Nunca alguien de SOEM le hizo una marcha a un intendente”, dicen.
Protagonismo y estrategia en las bases
El SOEM es el gremio mayoritario en casi todas las comunas de la provincia y quien lo conduce en Capital, es el concejal por la UCR Dugar Chappel, quien supo tener férreas peleas con Víctor Fayad cuando éste administraba los destinos de la municipalidad capitalina.
“Hay una disputa sindical, no se puede negar, de todas maneras SOEM supera por 5 o 7 veces la cantidad de afiliados que tiene ATE, que irrupciona en forma fuerte y después desaparece, vuelven, buscan afiliaciones y se van. Más que solucionar los problemas del personal, vienen a tratar de ingresar a Capital como un gremio fuerte y de ahí crecer”, indicó Chappel a este medio.
Los cuestionamientos recaen sobre cómo Macho actúa ante los reclamos porque “viene ofreciendo que han logrado cosas y mejoras y la gente empieza a acompañar, encuentran una posibilidad de meterse cuando hay malestar. Está pidiendo paritarias y no lo ha conseguido, vienen a un lugar que no conocen con cosas que no logran en su lugar de origen”, agregó en referencia a la discusión salarial a nivel provincial.
El propio titular de ATE asegura que “no vamos en busca de afiliados, ellos vienen a nosotros”, desmintiendo una maniobra intencional de captar las fichas de afiliación que tiene SOEM.
“Acá en Capital el tema es del salario, en otros municipios no los tenés como acá. Nosotros desde el año pasado estamos paritando. Estamos pidiendo un salario por arriba de la canasta de pobreza. Hay gente que trabaja 40 horas semanales y gana $ 10 mil, nuestra pelea es por el salario”, sostuvo el dirigente gremial a Los Andes.