La sesión está citada para las 12 del mediodía y se estima que se extenderá hasta la madrugada del jueves, debido a la típica complejidad del asunto en cuestión y al momento político que vive el país: pandemia y crisis socioeconómica.
Por primera vez en cinco meses, el debate se realizará con una mayor cantidad de diputados dentro del recinto: serán hasta 120 de los 257 integrantes, con respecto a los 45 que venían participando como máximo, a causa del distanciamiento físico recomendado por la pandemia.
De todas maneras, la votación será por vía electrónica y se permitirá que los diputados que no vayan al recinto puedan seguir participando de la sesión a distancia, ya sea porque pertenezcan a grupos de riesgo de la Covid-19 o por haber solicitado expresamente por nota no asistir de manera presencial.
Por eso, el paisaje para la discusión de la ley de leyes será más parecido al de una sesión tradicional y no al de un recinto despoblado, como hasta ahora.
La mayor cantidad de diputados presentes se dispuso a pedido del principal espacio opositor, Juntos por el Cambio (JPC), que sostiene que los asuntos de peso deben discutirse en el recinto, y no por internet. Y se comprometió a reunir este miércoles entre 90 y 95 diputados de los 116 que componen el interbloque.
El Frente de Todos (FDT) y el resto de las bancadas opositoras ocuparán las 25 o 30 bancas restantes, para llegar al número total de 120.
Objetivo
El Gobierno pretende que el Congreso tenga sancionado el Presupuesto 2021 antes del inicio de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el 9 de noviembre, sobre la deuda contraída durante la presidencia de Mauricio Macri.
La bancada que conduce Máximo Kirchner tiene 117 votos propios, con lo cual para asegurarse la aprobación del texto en general, y del extenso articulado del Presupuesto, necesita el apoyo de otras fuerzas políticas.
JPC ya definió una postura: la abstención en la votación en general del proyecto, que fue previamente debatido durante un mes en la comisión de Presupuesto y Hacienda, que preside el oficialista porteño Carlos Heller y que le dio despacho la semana pasada. De todas maneras, los cambiemistas sí votarán en contra de varios artículos con los que no están de acuerdo.
Tanto en el oficialismo como en la oposición realizaban cuentas en la víspera de la sesión y todos coincidían en que no faltarán los votos para la media sanción al texto, tal cual fue dictaminado en la comisión.
Qué proyecta el Gobierno
Entre sus ejes centrales, el primer Presupuesto del gobierno del FDT prevé una inflación del 29% y un dólar promedio de $ 102,4 (el oficial, claro).
Además, se destinarán $ 5,5 billones a gastos sociales para el pago de jubilaciones y asignaciones sociales, programas alimentarios, de economía social, entre otros, lo que representa el 65% de los recursos contemplados para 2021 y se reducirá el pago de intereses de la deuda pública.
En cuanto a infraestructura, sólo para obras de saneamiento y cloacas el Presupuesto tendrá un aumento del 500% con respecto a las partidas de 2019.
Además, será el primer Presupuesto diseñado con perspectiva de género, ya que se destinarán hacia esas políticas el 15% de sus recursos previstos para 2021.