El Gobierno nacional respaldó este martes la ley de alcohol cero al volante en todo el país. Lo hizo a través del director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Pablo Martínez Carignano, quien participó de una reunión de la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados donde comenzaron a tratarse los proyectos.
En la reunión -la primera en formato presencial en lo que va del año-, los diputados acordaron reunir evidencia y escuchar a todos los actores involucrados para encarar el debate de las siete iniciativas presentadas, que buscan modificar la Ley Nacional de Tránsito para establecer la tolerancia cero para todo tipo de vehículos.
“Hay visiones y experiencias para volcar en el Congreso a la hora de emitir un dictamen. Hay países de la región y provincias que ya tienen implementado el alcohol cero”, introdujo el presidente de la comisión, el radical tucumano José Cano, quien propuso elaborar un cronograma de trabajo.
Martínez Carignano, que acompaña un proyecto del exdiputado Facundo Moyano, informó que “en Argentina los siniestros viales son la primera causa de muerte en menores de 35 años” y también aseguró que “una de cada tres personas” que ingresan a una institución de salud después de un siniestro vial registran alcohol en sangre.
“Frente a este escenario, resulta difícil pensar que la situación vaya a mejorar si no tomamos una intervención concreta”, afirmó el funcionario, y criticó que la ley actual habilite diferentes niveles de tolerancia según el vehículo (cero para profesionales, 0,2 gramos para motociclistas y 0,5 para conductores particulares).
Martínez Carignano sostuvo que “el Estado debe bajar un mensaje claro de disociar el alcohol de la conducción” y negó que la reforma “pueda impactar negativamente en la industria”, al citar como ejemplo Uruguay, donde el alcohol cero rige desde 2017 y “la Cámara de Vitivinicultura dijo que no hubo un perjuicio en las ventas”.
Además de Uruguay, también tienen normativas al respecto Brasil y Paraguay, mientras que en Argentina son siete las provincias con tolerancia cero (Córdoba, Salta, Tucumán, Entre Ríos, Jujuy, Río Negro y Santa Cruz), además de grandes ciudades como Santa Fe, Rosario y Mar del Plata.
El titular de la Agencia Nacional de Seguridad Vial señaló que en estos lugares “hay muchos más conductores que dan cero” en los controles de alcoholemia, “porque el mensaje es que no hay que especular”.
También participó de la reunión Viviam Perrone, referente de Madres del Dolor y madre de Kevin Sedano, el adolescente que murió en 2002 tras ser atropellado por un auto en la localidad bonaerense de Vicente López.
“Hace 19 años que entro y salgo del Congreso pidiendo modificaciones”, manifestó Perrone, y pidió a los diputados que se focalicen en discutir solamente la reforma a la Ley de Tránsito en lugar de abarcar también el Código Penal o la Ley de Lucha contra el Alcoholismo porque “cuanto más se quiere cambiar, menos se logra”.
“Hoy estamos mentalizados en lograr alcohol cero al volante”, insistió, y tras señalar que “mueren entre 15 y 20 personas por día en siniestros viales”, concluyó con un mensaje a los legisladores: “Los años pasan, los días pasan, la gente muere y queda lesionada, quedan familias destruidas, y estamos esperando de ustedes”.
La diputada María Luján Rey (PRO) acompañó el reclamo de Perrone: “Estamos hablando del alcohol a la hora de conducir. No estamos hablando del consumo problemático del alcohol ni de lo que genera el alcohol en las personas, sino de lo que genera al momento de manejar. Por eso los proyectos tienen giro a la Comisión de Transporte y no a la de Salud”.
El mensaje fue en respuesta a un diputado de Jujuy, Daniel Ferreyra (Frente de Todos), quien pidió que sea la Comisión de Salud la que se aboque a estudiar los efectos del alcohol a la hora de conducir.
Otro jujeño, Jorge “Colo” Rizzotti (UCR) pidió poner énfasis en que la misma normativa se aplique en rutas nacionales y provinciales, y en ese sentido propuso “buscar un acuerdo con gobernadores para tener una regla nacional que establezca cuál será la tolerancia en toda la Argentina”.
En el mismo sentido se expresó el oficialista bonaerense Carlos Selva: “Para crear conciencia tiene que haber una decisión unánime desde el primer al último municipio. Ese debe ser el punto de partida”.
Por otra parte, la correntina Ingrid Jetter (PRO), autora de uno de los proyectos, aseguró que “esto no va en contra de las empresas vitivinícolas o cerveceras; lo que tiene que haber es responsabilidad del que conduce”. Finalmente, el mendocino Luis Petri (UCR) pidió analizar también los efectos de los estupefacientes al volante.
