El Presidente Alberto Fernández, Juan Manzur y medio gabinete nacional; Sergio Massa y Máximo Kirchner, más una veintena de intendentes y funcionarios bonaerenses, compartieron un almuerzo de trabajo en la Quinta de Olivos. El menú: elecciones y congelamiento de precios.
A tres semanas del 14N, la plana mayor del Frente de Todos fue convocada por Alberto Fernández para revisar el desarrollo de la campaña electoral en territorio bonaerense, un distrito emblemático gobernador por oficialismo, donde se pretende recuperar los cuatro puntos que Juntos le sacó en las primarias del 12 de septiembre.
Axel Kicillof se sumó de manera virtual a la sobremesa, pero a la reunión envió una comisión jerarquizada: su jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, la ministra de gobierno, Cristina Alvarez Rodríguez y el ministro de Infraestructura, Leonardo Nardini. Los tres fueron incorporados al staff de Kicillof después de las PASO. Insaurralde y Nardini pidieron licencias en las intendencias de Lomas de Zamora y Malvinas Argentinas.
Según trascendió, el ministro Eduardo “Wado” de Pedro expuso un cuadro de situación de la campaña. El titular del ministerio del Interior (y la cuotaparte que La Cámpora tiene en el gabinete nacional) acompañó el miércoles al Presidente en la visita a Chubut, y fue uno de los oradores principales en el acto del Frente de Todos en Comodoro Rivadavia. De Pedro enfatizó los conceptos de “territorio” y “cercanía” como clave en la campaña.
A propósito de esto, el Presidente estuvo ayer en un colegio secundario de Lomas de Zamora, donde conversó con una veintena de estudiantes. En la Casa Rosada los denominan “microencuentros”. Alberto Fernández ya realizó charlas cara a cara con vecinos de Ensenada y Avellaneda. Massa también estuvo esta semana de recorrida electoral, con encuentros vecinales en Laferrere (La Matanza) y San Antonio de Giles.
El Frente de Todos apunta a fortalecer el despliegue territorial, ahora montado sobre una de las últimas políticas gubernamentales: el congelamiento dispuesto a 1.432 productos de la canasta familiar. La medida dictada por el Secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti (otra incorporación post-primarias), se discutió en el encuentro, necesita la articulación de distintas áreas gubernamentales y distritales. “No hay manera de llevar adelante un control de precios si no colaboran las intendencias y las asociaciones civiles”, confió a este diario un funcionario de Comercio Interior.
Algo de esto ya discutieron el miércoles por la tarde Feletti, Kicillof e intendentes bonaerenses. “La provincia se va a poner a la cabeza de los controles de prensa”, anunció en esa oportunidad el gobernador.
Este mediodía se acercaron a Olivos 16 intendentes del conurbano y también los mandatarios de Mercedes y General Las Heras, dos localidades del interior bonaerense.
En la Quinta Presidencial hubo consenso sobre el impacto que hasta ahora ha tenido el congelamiento de precios. Se interpreta que la medida fue recibida de manera positiva en amplios sectores de la sociedad, más allá del rechazo y la resistencia proclamada por las principales empresas del sector alimenticio, y la advertencia del peligro de desabastecimiento. En el Frente de Todos aspiran a polarizar con Juntos por el Cambio sobre el congelamiento de precios.
Pero en la sobremesa se concluyó también que el impacto positivo que ahora dicen ver, se irá diluyendo si la medida no se traduce a la realidad. Es decir, los precios realmente deben quedar congelados en las góndolas y no en las consignas de campaña.
Del encuentro, además de Manzur y De Pedro, participaron los ministros Santiago Cafiero, Juan Zabaleta, Gabriel Katopodis, Aníbal Fernández, Alexis Guerrera, Julián Domínguez y Jorge Ferraresi. También estuvo Malena Galmarini, la titular de Aysa y referente del Frente Renovador.