Cristina Kirchner reaparece en Viedma, Río Negro, y hay gran expectativa por lo que pueda decir respecto de los fundamentos de su condena, difundidos ayer, y de la interna del Frente de Todos.
La presidenta del Senado llegó a esa localidad minutos después de las 17:15 de este viernes y el acto oficial comenzó pasadas las 18:20. Al aeropuerto Gobernador Castello concurrieron a recibirla la gobernadora, Arabela Carreras, el senador Martín Doñate y el intendente de Viedma, Pedro Pesatti. La mandataria provincial le obsequió a la Vicepresidenta una bandera de Río Negro confeccionada por una artesana local.
La organización del acto oficial corrió por cuenta de la Universidad Nacional de Río Negro, que distingue con el doctorado “Honoris Causa” a CFK y se lleva a cabo en el interior del recientemente inaugurado polideportivo, un espacio cerrado de 50 metros de largo por 30 metros de ancho, previsto para prácticas deportivas y actos. Hay poco más de 1.000 personas en ese lugar, detalla Infobae.
Paralelamente, fuera del perímetro universitario hay un acto más informal, más colorido y sobre todo, masivo. El Partido Justicialista rionegrino convocó a la militancia, pero también lo hizo el peronismo disidente de la conducción partidaria provincial, por lo que se estima una masa superior a las 6.000 almas. Hay una pantalla gigante para seguir el acto de distinción y la disertación sobre política y economía que ofrecerá CFK.
Por su parte, la Policía de Río Negro dispuso un riguroso esquema que incluye puestos móviles en el trayecto de menos de dos kilómetros que separa el aeropuerto de la sede universitaria y una casilla de seguridad a pocos metros del acceso al edificio de estudios.
Además, afectó a uniformados de las localidades de Viedma y las aledañas San Antonio Oeste y General Conesa y la división de operaciones especiales con efectivos de Cipolletti y General Roca. En total hay unos 200 efectivos de la fuerza de seguridad provincial, que se suma a la veintena de agentes federales que custodian a la ex mandataria.
El dispositivo que trasladó desde el aeropuerto viedmense hasta la universidad y viceversa fue llamado como “La cápsula”, dado que la ex jefa de Estado fue trasladada por tierra a lo largo de los casi 2 kilómetros en línea prácticamente recta que existe entre un punto y el otro.