Mientras en la Justicia ya quedó imputado por violencia de género contra Fabiola Yáñez, el expresidente Alberto Fernández sigue sumando cuestionamientos respecto a su comportamiento con otras mujeres mientras ejercía el mayor cargo del país. Esta vez, con la intervención de la ex vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, la responsable de elegirlo para liderar la fórmula del Frente de Todos en 2019.
Clarín reveló este jueves detalles de la noche del 14 de septiembre de 2021 en la Quinta de Olivos, justo después de la derrota electoral oficialista en las PASO legislativas. Cristina Fernández de Kirchner acudió a la residencia presidencial para reprocharle el fracaso y pasarle factura por las fallidas medidas económicas. Para entonces, la entonces vicepresidenta ya no chateaba por WhatsApp ni por Telegram, esta última la plataforma elegida para evitar filtraciones.
La reunión de los Fernández duró tres y horas media. El ministro de Economía, Martín Guzmán, fue el principal chivo expiatorio de los reclamos de Cristina, en la previa del amague de renuncias masivas del medio gabinete que le era leal a ella. Si bien la conversación entre Cristina y Alberto fue en su mayoría por la derrota de las PASO y cómo remontar en las legislativas generales posteriores (que terminaron con Juntos por el Cambio como el espacio más votado), la vicepresidenta advirtió lo que tres años después, luego de la denuncia de Fabiola Yáñez, se convirtió en el mayor escándalo político que se recuerde.
“Alberto, tenés que dejar de joder con las minas que traés acá, sos un pajero pero sos el Presidente. Empezá a controlar lo que hacés en tu vida privada porque todo el mundo lo sabe y nos va a causar problemas a todos”, le dijo Cristina a Alberto Fernández, según lo publicado por Clarín.
En ningún momento, aseguran fuentes del kirchnerismo como también del albertismo, Fabiola llegó a realizar planteos de que había sido víctima de violencia de parte de Alberto. Sí, en cambio, eran conocidas las infidelidades recurrentes del Presidente, que motivaban discusiones con la primera dama. Eran parte de los comentarios que circulaban por Olivos y por la Rosada, así como los coqueteos constantes de parte del presidente a funcionarias y periodistas.
Alberto Fernández, desde la cama y “en cuero”
Según Clarín, muchos recuerdan aún hoy el día en que un importante empresario comentó a fuentes del gobierno albertista que una empleada suya había sido intimidada por Alberto Fernández con una videollamada telefónica de medianoche que ella decidió atender y que para su sorpresa encontró del otro lado del celular al Presidente hablándole en cuero, desde la cama y en modo pretendidamente seductor.
La historia quedó ahí, pero refleja uno de los tantos descuidos de Fernández que Cristina no le perdonó.
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