El ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, se mostró “enojado” hoy con su antecesor Adolfo Rubinstein por las críticas expresadas a las políticas contra la pandemia y lo responsabilizó del crecimiento de casos en la provincia de Mendoza.
El funcionario nacional defendió la estrategia sanitaria desplegada por el Gobierno nacional en acuerdo con los gobernadores. “Tenemos un bajo número de muertos que es lo que de entrada quisimos evitar. La pandemia era inevitable, es un fenómeno mundial”, dijo.
En una entrevista radial, el ministro de Salud le apuntó a Rubinstein: “Algunos ex funcionarios que realmente hicieron un papel muy malo, dejaron sin vacunas a la Argentina y sin política de salud, se atreven a decir barbaridades”.
Tras aclarar que estaba hablando de Rubinstein, señaló que el exfuncionario asesora a los gobernadores de Jujuy, Gerardo Morales, y de Mendoza, Rodolfo Suárez, en la administración de la cuarentena.
“Por hacerle caso a él, algunos de sus correligionarios tomaron medidas de aperturismo masivo, como Jujuy por ejemplo. Bastante daño ha hecho antes (Rubinstein) como para que siga haciendo daño ahora”, afirmó González García en Radio 10.
Y agregó: “También Mendoza ha actuado porque él es el consejero, está allá y dice cosas. No solo ha sido un pésimo ministro sino que es un peor ex ministro, lamentablemente. Y no quiero hablar de otras cosas: tiene seis causas judiciales por lo que hizo en este ministerio”.
El ministro de Salud de Alberto Fernández dijo estar “enojado” con Rubinstein, a quien lo cuestionó como profesional pero también como dirigente integrante de un gobierno “al que abandonó”.
“Está haciendo lo que está haciendo como para hacerse la víctima después. Me resulta inadmisible un tipo que abandona su gobierno unos pocos días antes porque había perdido la elección resulta que ahora es el profeta de lo que hay que hacer”, disparó.
González García dijo estar “enojado” por las críticas expresadas por ex funcionarios a la política sanitaria, incluyendo al ex presidente Mauricio Macri, a quien cuestionó por hablar desde Europa mostrando “que le importan tres cornos los argentinos”.