El gobernador Alfredo Cornejo le aceptó la renuncia al juez de la Suprema Corte de Justicia, Pedro Llorente, que se concretará el próximo 28 de febrero, y hoy sin arriesgar nombres, dijo que priorizará los “antecedentes” profesionales para encontrar a un postulante al máximo tribunal.
Cornejo no descartó que una mujer pueda ser su postulante y se encargó durante un largo rato, a defender las designaciones que se dieron para la Corte, tanto en su primer mandato como en el anterior de Rodolfo Suárez: José Valerio, Dalmiro Garay y María Teresa Day. En ese tono, respondió a las críticas que esgrimieron desde el peronismo con duras chicanas contra el juez Mario Adaro, designado durante el gobierno de Celso Jaque.
“No tengo el nombre y no quiero adelantar hasta que lo tenga resuelto. Voy a hacer algunas consultas antes de eso. Puede ser una mujer, por supuesto”, dijo en conferencia de prensa, luego de participar del acto por el 140° aniversario del Departamento General de Irrigación.
Cornejo señaló que “designar un integrante de la Corte es un acto institucional muy relevante y me lo tomo muy en serio”. En ese tono, apuntó: “Todas las propuestas que he hecho yo fueron de personas con antecedentes, que cumplen los requisitos”.
La Suprema Corte de Justicia está integrada por siete ministros. Además de Llorente, la conforman Dalmiro Garay (presidente), Mario Adaro, Omar Palermo, José Valerio, Teresa Day y Julio Gómez.
En 2025, Cornejo tendrá la posibilidad de designar a un nuevo ministro para que llegue a la Corte; y en ese caso sería el único gobernador (sin tener en cuenta a Llaver, que renovó por completo la Suprema Corte con la vuelta de la democracia en 1983) en haber propuesto a tres miembros del máximo tribunal. En su primera gestión, el mandatario radical postuló a Dalmiro Garay y José Valerio; y ahora tendrá que elegir un nuevo nombre.
En tanto, los anteriores gobernadores que postularon a ministros que están aún en el cargo fueron el actual senador nacional radical Rodolfo Suárez, con Teresa Day; el peronista Francisco Pérez, con Omar Palermo y Julio Gómez (antes había propuesto a la legisladora provincial del PJ Miriam Gallardo, pero no pasó el filtro de la votación en el Senado); y el hoy intendente de Malargüe Celso Jaque, con Mario Adaro.
La defensa de sus designaciones
Cornejo se refirió a los vínculos políticos que le critica la oposición y defendió uno por uno, los tres nombres que se incorporaron al máximo tribunal en los últimos ocho años. “Propuse al Doctor Valerio, que tiene una larga tradición en el Poder Judicial. Hace más de treinta años fue diputado provincial y ese fue el vínculo partidario. Me parece que no está mal participar en política, ya cuando se toma como negativo, empezamos mal”, dijo en principio.
Además, indicó que en este caso y en el del Procurador Alejandro Gullé, aplicó una “afinidad a una doctrina del Derecho Penal”. “Cuando propuse a Alejandro Gullé, tenía más de 40 años en el Poder Judicial. Nunca fue afiliado a un partido político”, señaló.
“Un Procurador es el que lidera la política criminal de Mendoza. El gobernador es el jefe de la Policía, según la Constitución. Entonces deberían trabajar en simultáneo para combatir la inseguridad. Es lógico que tengan afinidad. Ahora, no era partidario. Sin embargo, siguen diciendo que todas las propuestas son partidarias”, manifestó.
Y continuó: “Cuando designé a Dalmiro Garay, era un abogado que en criterio de muchas personas del Derecho Administrativo del país es uno de los principales especialistas. Fue durante más de 10 años un abogado del Estado. La Asesoría de Gobierno es el principal estudio jurídico que tiene el Estado, al igual que la Fiscalía de Estado”.
Luego, defendió la designación de la jueza María Teresa Day, realizada por su antecesor Suárez: “Cuando Rodolfo Suarez propuso a Teresa Day, la cuestionó la oposición y llevaba más de 30 años ejerciendo en la Justicia. Nunca fue afiliada del partido. Su padre fue diputado nacional del radicalismo en la década del 70. La eligió Suárez, de mi mismo equipo y yo avalé esa designación. Siempre el criterio ha sido personas con antecedentes”.
Críticas hacia el peronismo y el juez Adaro
Cornejo también se refirió a la exsenadora provincial Patricia Fadel (PJ), que reclamó a través de sus redes sociales que una mujer sea la postulante para la Corte. En ese tono, lanzó dardos contra el peronismo por haber tenido la oportunidad de reemplazar con una mujer a la magistrada Aída Kemelmaker, a quién describió como “Messi”, cuando dejó un cargo vacante en el máximo tribunal en 2010. El por entonces gobernador Celso Jaque, eligió a quien era su ministro de Gobierno, Mario Adaro.
“He visto un tuit de la exsenadora del peronismo, Patricia Fadel, recomendando a una mujer y que no sea partidaria. Bueno, la verdad que tuvieron la oportunidad cuando gobernaban ellos. Se fue Kemelmajer, que era una abogada que tenía muy buenos antecedentes, reconocida nacional e internacionalmente. Era Messi y mandaron a Adaro”, criticó.
“Es una persona legítima, la eligió el Senado y fue a la Corte… se cansa de defender a los empleados públicos vagos en todos sus fallos, pero es legítimo. Yo tengo que aceptar esa designación. Que Adaro haya sido ministro de Gobierno, lo asimila a Dalmiro Garay”, comparó con más chicanas contra el peronismo y el juez de la Corte.
Cornejo prosiguió con el tono irónico y dijo que en las redes lo tildan como “el más machista de los machistas”, por lo que se jactó de ser “el único gobernador en la historia, no solo en ser reelecto, sino en llevar dos vicegobernadoras”.
“En el tema de la Corte, los argumentos tienen que ser categóricos. Se habla de una Corte partidaria cuando no lo es y eso habla muy mal de la institucionalidad de Mendoza y no es cierto. Hoy la Justicia es mucho más ágil que cuando estaba Pérez Hualde, Kemelmajer de Carlucci o Nanclares”, comparó.
Y para cerrar su extenso descargo contra la oposición, lanzó: “Los desafío a que encuentren un solo fallo que me haya beneficiado a mí y no al interés general de Mendoza. Al contrario, tenemos un montón de fallos que van en contra del Gobierno, entre ellos firmados por Dalmiro Garay. Y la Sala 2 de Adaro y Palermo, cuando no se sorteaban las causas, nos sacó todo en contra”.