Finalmente, tal como había anticipado este diario, una funcionaria de Alfredo Cornejo quedará al frente Vialidad Nacional en Mendoza.
En efecto, la elegida para el cargo es Emilce Lozano, quien se desempeñaba como inspectora de obras de la Subsecretaría de Infraestructura, en la órbita del Ministerio de Gobierno, Infraestructura y Desarrollo Territorial, que está a cargo de Natalio Mema.
Lozano es una ingeniera en construcciones de San Rafael que tiene larga trayectoria en el área. La exfuncionaria de Cornejo había adelantado el 28 de marzo pasado que le habían ofrecido el puesto desde el Gobierno nacional y dijo que ella lo había aceptado.
También había recibido el impulso del gobernador Cornejo, quien ante la consulta de la Nación la mencionó como una persona con cualidades técnicas para el puesto. “Es un cuadrazo”, decían directamente algunos funcionarios del Gobierno provincial, entusiasmados con la posibilidad de que fuera designada.
Pero faltaba que se oficializara el nombramiento a través de una resolución del Gobierno nacional. Esto ocurrió ayer, según indicó la propia funcionaria ante el llamado de Los Andes.
Lozano es personal de planta del Estado provincial y trabajó 8 años en la Dirección Provincial de Vialidad, periodo que abarcó desde la gestión del justicialista Francisco Pérez hasta la del radical Rodolfo Suárez, pasando por el primer gobierno de Cornejo.
Por otro lado, la conducción del Distrito 4 (Mendoza) de la Dirección Nacional de Vialidad se encontraba vacante desde febrero. Hay que recordar que Guillermo Amstutz, el hombre a cargo del organismo durante la gestión de Alberto Fernández, se mantuvo en Vialidad hasta entonces porque Javier Milei no había designado a nadie.
Amstutz se fue de Vialidad sin que hubiera sucesor o sucesora. Recién al cumplirse cuatro meses del inicio de la gestión de Milei se cubrió el puesto.
Lozano asume en un contexto difícil, en el que la obra pública nacional permanece paralizada. El Gobierno provincial está reclamando particularmente que se avance con dos obras inconclusas y que dependen de este organismo: la Variante Palmira y la reconstrucción de los dos puentes de la ruta 40 que hace años se llevó puestos una crecida. También le corresponde la construcción de la autopista a San Juan, un viejo anhelo que ha vuelto a quedar en suspenso.
El panorama de las obras viales es poco alentador, pero para algunos funcionarios del Gobierno provincial, igual es buena noticia que una exfuncionaria local tome el control de Vialidad nacional.