El Tribunal Oral Federal 6 condenó a Ricardo Jaime, ex secretario de Transporte de Néstor y Cristina Kirchner, a la pena de ocho años de prisión e inhablitación perpetua para ejercer cargos públicos por enriquecimiento ilícito.
La condena debe ser traducida de la siguiente manera: el ex funcionario aumentó de forma injustificada su patrimonio mientras manejó el área de transporte del kirchnerismo debido a las coimas recibidas por parte de los empresarios del sector. Según la sentencia, no hay otra explicación para el enriquecimiento ilícito que la corrupción. La condena para Jaime también abarca otros delitos, los cuales fueron investigados por casi catorce años.
En el mismo fallo, los jueces del Tribunal Oral Federal 6 condenaron a Jaime y al ex ministro de Planificación durante el kirchnerismo, Julio De Vido, por el delito de defraudación contra la administración por una compra de trenes iniciada en 2005 a España y Portugal. La pena para De Vido es de cuatro años de prisión, detalla Infobae.
Jaime, en este caso además fue condenado por el cobro de coimas. Según se determinó en el juicio, esas sumas ilegales se percibieron a través de una firma que manejaba Manuel Vázquez, principal testaferro de Jaime y también condenado junto al ex secretario de Transporte. Para Vázquez la pena fue de cinco años y ocho meses de prisión. Y además inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
Cuando realizó su alegato la fiscal del juicio, Gabriela Baigún, había pedido ocho años de prisión para Jaime y cuatro para De Vido. Los jueces Julio Panelo, Fernando Canero y Ricardo Basílico coincidieron con el pedido de pena de la fiscal.
La fiscal -al abrir su alegato- fue directa: “Jaime se enriqueció ilícitamente mientras fue funcionario público”. Baigún hizo una introducción en la que además de asegurar que tiene probado el enriquecimiento, dijo que era “pobre” cuando llegó al cargo pero eso cambió porque “los favores de los empresarios no tardaron en llegar”. La fiscal concluyó que Jaime “intentó disimular su crecimiento patrimonial mediante testaferros”. Por eso señaló que “se ha probado que Jaime se enriqueció de manera apreciable e injustificada cuando fue funcionario público”. Baigún calificó al expediente iniciado por el crecimiento patrimonial de Jaime como “un caso de libro sobre los funcionarios que se enriquecen”.
En el mismo juicio, que comenzó en abril de 2019, Jaime fue acusado por una defraudación cometida en el ferrocarril Belgrano Cargas. El ex funcionario kirchnerista además había llegado a juicio por el uso de manera personal de dos autos que estaban asignados a una obra vial y al OCCOVI. Igual recorrido judicial hizo Claudio Uberti, ex director del OCCOVI durante los primeros años del kirchnerismo. El Tribunal Oral Federal 6 determinó que esos casos prescribieron por lo que Jaime, Uberti y los imputados en el caso del Belgrano Cargas fueron sobreseídos.