La Cámara de Diputados sesionaba hoy desde las 11:00 para el tratamiento del proyecto de legalización de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), 854 días después de que un proyecto similar fuera derribado por el Senado.
Por lo acordado por los bloques en labor parlamentaria, se espera que la sesión tenga dos partes. Primero se debatirá la legalización del aborto y luego será el turno del proyecto de ley para el programa de los “Mil Días”, ambos impulsados por el Gobierno de Alberto Fernández.
Los jefes de bloques auguran una extensa sesión, la primera mayoritariamente presencial después de casi diez meses en los que el Congreso operó de forma mixta: con algunos legisladores en el recinto y otros en sus domicilios o despachos.
Esto es porque de los 257 diputados al menos 170 pidieron hacer uso de la palabra sobre el proyecto de legalización de la IVE y 50 hablarán cuando se trate la iniciativa para instaurar el programa de los Mil Días.
Algunas estimaciones indicaban que la votación del proyecto del IVE podría darse cerca de las 4:00 de la mañana del viernes, a pesar de que se instrumentarán algunas decisiones de consenso político para que la sesión no sea tan extensa.
Para acortar la extensión de la sesión se decidió que haya exposición de los miembros informantes, Cecilia Moreau del Frente de Todos y Carmen Polledo de PRO y se pase directo a los oradores individuales, con un tiempo de cinco minutos cada uno. No habrá tiempo para los bloques y tampoco para los cierres, lo cual ahorra unas cuatro horas de debate.
El plenario de las comisiones de Legislación General, Legislación Penal, Mujeres y Diversidades y Acción Social y Salud Pública emitió ayer dos dictámenes sobe la IVE. El texto logró 77 firmas, mientras que el dictamen de minoría reunió 30; y cuatro legisladores se abstuvieron.
El proyecto llegó al recinto de Diputados con apoyo mayoritario, por lo que se des cuenta la media sanción. Distinto es el panorama en el Senado, aunque en las últimas horas crecieron las chances de aprobación por dos cambios realizados a la iniciativa.
Pablo Yedlin, presidente de la Comisión de Acción Social y Salud Pública de Diputados, dijo esta mañana que los legisladores que están a favor de la aprobación del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) tienen “los votos” para la media sanción.
Yedlin señaló que “no es una enorme diferencia” la que hay a favor del proyecto en Diputados, pero sí mayor que la que se dio en el debate de 2018 cuando un proyecto muy similar también obtuvo la media sanción.
“Se intentó conseguir un proyecto que, además de conseguir la media sanción en Diputados, también satisfaga algunos votos díscolos del Senado, en particular de los que pidieron algunas modificaciones”, dijo Yedlin.
Moreau, vicejefa bloque Frente de Todos en la Cámara baja, dijo en declaraciones radiales: “Tengo mucha esperanza en que el Senado también acompañe y sea Ley”.
Operativo en las calles
El operativo de seguridad que se despliega en las inmediaciones del Congreso contempla la colocación de un vallado que separa la Plaza Congreso en dos y un corredor para ordenar las manifestaciones a favor y en contra de la iniciativa.
El operativo fue acordado entre autoridades del Gobierno nacional, el porteño y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.
El despliegue de las fuerzas de seguridad en el que se demarcó un área perimetral de protección de la sede parlamentaria y la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires estará a cargo del operativo.
La Policía Federal Argentina se encuentra a cargo de la protección del Palacio Legislativo y del ingreso de los legisladores, mientras que la Policía de la Ciudad tiene jurisdicción sobre el resto del espacio público de la movilización.
A la Policía de la Ciudad le corresponde garantizar que el colectivo identificado con el pañuelo verde se concentre sobre la avenida Callao, donde se montarán pantallas para que puedan seguir el debate, mientras que el colectivo identificado con el color celeste lo hará sobre la avenida Entre Ríos, donde también fueron colocadas pantallas.
Según se precisó, entre ambos grupos habrá una separación de 100 metros, la cual se realizará mediante un vallado montado y controlado por la Policía de la Ciudad.
Para ello, además de disponer vallas móviles y fijas, y ambulancias para atender cualquier necesidad, se dispusieron dos corredores separados, cuyo control también estará a cargo de la Policía porteña.
Esos dos corredores se dispusieron sobre los laterales de la Plaza del Congreso, con el fin de que el sector “verde” utilice como espacio de circulación la avenida Rivadavia y su continuidad por Avenida de Mayo; mientras que el ‘celeste’ lo haga sobre la extensión de la calle Hipólito Yrigoyen.