En una reñida votación, el Jury de Enjuiciamiento archivó el pedido de destitución por “mal desempeño” que pesaba contra el juez Eduardo Marteareana. Tal acusación había sido remitida en marzo del año pasado al cuerpo por el diputado de Cambia Mendoza, Enrique Thomas, a raíz de una polémica medida a favor de un grupo de delincuentes que asaltó su casa en 2020.
Aunque los votos son secretos, Los Andes confirmó que la votación culminó con un resultado ajustado de 11 a 10. Los siete integrantes de la Suprema Corte de Justicia votaron en conjunto contra la denuncia. Hablamos de los jueces Dalmiro Garay, Teresa Day, José Valerio, Pedro Llorente, Omar Palermo, Mario Adaro y Julio Gómez.
Además se sumaron los tres legisladores del peronismo; los senadores Helio Perviú y Mauricio Sat y el diputado Germán Gómez; y el senador de La Unión Mendocina, Ariel Pringles.
Mientras que del lado opuesto, en busca de avanzar en el proceso, se ubicaron los nueve representantes de Cambia Mendoza. Votaron a favor los senadores oficialistas Martín Kerchner, Natacha Eisenchlas, David Sáez y Alejandro Diumenjo; y los diputados Jorge López, Daniel Llaver, Mauricio Torres, Beatríz Martínez y Ricardo Tribiño. A este tándem se agregó el diputado demarchista Gustavo Cairo, lo que mostró una fisura en la fuerza opositora, que podría haber torcido el resultado.
Sobre la votación unánime que tuvo la Corte, una fuente judicial comentó que “ninguno de los ministros de la Corte vio causal de jury en el accionar de Martearena”. Es decir que el juez actuó según su criterio cuando decidió anular como prueba la geolocalización de los celulares de los delincuentes que asaltaron a Thomas y produjeron otros delitos, pero no lo vieron como motivo suficiente para investigarlo.
“No se lo puede juzgar por su criterio, sí no se está de acuerdo con un fallo se debe apelar y en última instancia definir el máximo tribunal”, sostienen en ese punto. Vale decir que Thomas mantuvo ese camino con su denuncia hasta la Corte y en marzo de 2023, los jueces rechazaron la anulación de Martearena y convalidaron la prueba cuestionada. Por lo que los asaltantes hoy se mantienen detenidos y serán juzgados. A pesar de que la Corte se opuso a esa decisión, en esta instancia no tomó la determinación de avanzar en su destitución.
Desde el peronismo entendieron que el mal desempeño no estaba bien fundamentado: “Esa situación tiene que revertir gravedad y ser seria y profunda. En este caso no había precisiones respecto de lo que se denunciaba y tampoco había pruebas. La ley es muy específica cuando habla del mal ejercicio de las funciones. En este caso no se corrobora que haya actuado en falta de la ley o con una conducta contraria a derecho”, justificó un legislador del PJ en contacto con este diario.
En tanto, desde el oficialismo lamentaron “profundamente” el resultado porque “de ninguna manera se trataba de culpabilizar al juez Martearena, sino de poder abrir una instancia de inicio del trámite para poder conocer la versión de él y la parte denunciante”.
“Nosotros creíamos que había elementos para poder investigar más, pero la mayoría decidió otra cosa y por supuesto respetamos. Hubiera sido una buena instancia, teniendo en cuenta el calibre de la denuncia”, agregaron.
Por su parte el diputado Cairo (LUM), que votó a favor de avanzar en el proceso, consideró: “Como representante de una parte de la ciudadanía que está clamando por la inseguridad, creo que un juez que toma estas medidas, tiene que tener consecuencias porque sino ¿qué mecanismo de defensa tienen las víctimas de estos delitos?”.