El exsecretario de Seguridad Sergio Berni y su entonces segundo, Darío Ruiz, serán citados por el juez federal Julián Ercolini en el marco de la causa que investiga la alteración de la escena del fallecimiento del fiscal Alberto Nisman, ocurrido en enero de 2015. Ambos serán notificados de la imputación formal.
El fiscal Eduardo Taiano formalizó la imputación contra Berni y Ruiz, acusándolos de graves irregularidades durante su intervención en el departamento de las torres Le Parc de Puerto Madero, donde fue hallado el cuerpo sin vida del fiscal. Según la acusación, los movimientos de los funcionarios habrían puesto en riesgo el esclarecimiento del caso.
Una vez hallado Nisman con un balazo en la cabeza dentro del baño, al lugar ingresaron al menos 80 personas, entre ellos Berni, en el marco de “concretas y graves irregularidades cometidas por los funcionarios públicos” que pusieron “en riesgo el descubrimiento completo de la verdad”, sostiene la fiscalía en su imputación.
Cabe mencionar que en esta parte de la investigación ya estaban imputados el ex jefe de Policía Federal Román Di Santo y de Prefectura Luis Heiler, quienes ya se notificaron en los tribunales federales de Retiro. Ninguno de ellos fue convocado aún por Ercolini para prestar declaración indagatoria, algo que debe resolver el magistrado.
Al respecto, el abogado Tomás Farini Duggan, ex querellante en el caso en representación de la DAIA, recordó entre muchas otras irregularidades que “el primer juez del caso fue hasta el departamento donde vivía Nisman, habló con Berni en la planta baja y no subió a la escena del crimen. Después se fue”.
“Hubo una muy fuerte campaña mediática por parte del gobierno de Cristina Kirchner para instalar que Nisman se suicidó”, consideró en declaraciones a Radio Splendid.
Duggan también recordó que el entonces jefe de Gabinete Jorge Capitanich “hizo una cadena nacional mostrando la ruta de vuelo del periodista que dio a conocer la noticia de la muerte de Nisman, que se había ido del país por miedo a que lo maten”, en referencia a Damián Patcher.
Para el fiscal Taiano, hubo “desidia” e “impericia” en el manejo de la escena del crimen, según concluyó en base a declaraciones testimoniales que tomó a diferentes personas que estuvieron en el lugar, incluidos agentes de Prefectura con jurisdicción en la custodia de Puerto Madero.