El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, sostuvo hoy que al presidente Javier Milei “se le dice basta” y eso es porque “por la Argentina pasó, pasa y pasará, y volverá al gobierno, el peronismo”. Y agregó: “La historia está inconclusa y por eso estamos acá para escribirla; si alguno piensa que vinimos solo para recordar el pasado, se equivoca, estamos para escribir el futuro”.
Desde Berisso, en el Día de la Lealtad Peronista, Kicillof sostuvo que nadie va a “robarle la alegría” a los peronistas y llamó a celebrar que “este desastre” que atribuyó a la gestión de Javier Milei “no dura para siempre”. En ese marco, respaldó hoy a la expresidenta Cristina Kirchner, al advertir que “en pocos días un tribunal de la vergüenza en Comodoro Py, con una causa inventada y trucha, va a querer hacerle creer a alguien” que la exmandataria “es culpable en la causa Vialidad”.
“Basta de persecución y proscripciones”, reclamó el mandatario bonaerense en el acto por el 17 de octubre. Además, Kicillof advirtió esta tarde que “cuando hay crisis económicas como la que generó” en el país la gestión del presidente Javier Milei, “son las mujeres las que se ponen al frente”. Y puntualizó: que “la provincia de Buenos Aires se gobierna desde su capital, desde esta región”.
Cerca de la CGT pero sin La Cámpora
El gobernador de Buenos Aires estuvo acompañado por la primera plana de la Confederación General del Trabajo (CGT) e intendentes del PJ, sin la presencia de ningún representante de La Cámpora. En medio del enfrentamiento con el sector que lidera la expresidenta Cristina Kirchner y a poco de finalizar el período para presentar listas para la competencia por la presidencia del Partido Justicialista (PJ), Kicillof fue protagonista del acto más amplio de la jornada por el Día de la Lealtad.
Sobre el escenario lo acompañaron los secretarios generales de la CGT, Héctor Daer, Juan Carlos Schmit y Pablo Moyano. De los tres, el secretario general adjunto de Camioneros es el más cercano al cristinismo y al diputado nacional Máximo Kirchner, pero decidió participar del acto de Kicillof y dijo que el “enemigo” es el gobierno de Javier Milei y no el gobernador o la exmandataria nacional.
Entre los sindicalistas presentes también estuvieron el titular de Suteba, Roberto Baradel, el referente de la CGT Abel Furlan, y el titular de la CTA de los Trabajadores y diputado nacional Hugo Yasky. En tanto, entre los intendentes del PJ que lo acompañaron estuvieron Fernando Espinoza (La Matanza), Andrés Watson (Florencio Varela), Julio Alak (La Plata), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Gastón Granados (Ezeiza), Lucas Ghi (Morón), Fernando Moreira (San Martín) y Juan José Mussi (Berazategui).
También acompañaron al gobernador el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, quien trabaja abiertamente por el armado de Kicillof rumbo a 2027, y el jefe comunal local, Fabián Cagliardi. El mandatario provincial estuvo franqueado por su vicegobernadora, Verónica Magario; el ministro de Gobierno provincial, Carlos Bianco; y el ministro de Desarrollo para la Comunidad, Andrés “Cuervo” Larroque.
De esta manera, de acuerdo al reporte de la Agencia Noticias Argentinas, ningún dirigente o intendente de La Cámpora participó del acto de Kicillof, en medio de la tensión por la puja en el PJ, en la que el gobernador no avaló la postulación de Cristina Kirchner a presidir el partido.
Kicillof definió al gobierno de Milei como estafa “piramidal” y llamó a la unidad
Axel Kicillof definió a la gestión de Javier Milei como una estafa “piramidal” y, si bien dijo que no es momento de dar “clases” en el peronismo, alentó la unidad al advertir “lo que quiere la derecha es dividirnos”. Además de la alusión a Fernández de Kirchner, Kicillof aseguró que en el Gobierno de Milei sabe que “este proyecto político y este pueblo es el que el año que viene le va a poner un freno a Milei en las urnas y va a empezar a construir una alternativa superadora”.
Y pidió “no dramatizar” al citar a la exmandataria con la arenga de que “no sobra nadie y en la discusión somos todos iguales”, por lo que llamó a “construir una síntesis superadora”. “No me interesa disputar ninguna interna, mi responsabilidad y mi mandato es el de conducir un gobierno que está dedicado, en las peores circunstancias, a ofrecer a los bonaerenses un escudo que proteja y atenúe lo que está haciendo Milie”, definió.
Y añadió que “sí quiere colaborar con la construcción de una alternativa superadora”. “No es momento de dar clases, sino de escuchar. Si algo quiere quiere la derecha es dividirnos”, advirtió. Al recibir de la militancia el cántico “Axel presidente”, el mandatario pidió cambiarlo por “La patria no se vende” y advirtió a los asistentes que “falta mucho” para las elecciones.