El conflicto entre Capital y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) ha traspasado las fronteras de una disputa salarial para servir de base de un nuevo frente de conflicto político entre el oficialismo provincial y la oposición. Con el fracaso ayer de la reunión conciliadora, el gremio anunció un “paro general” para el 16 de junio e intentará que la convocatoria se provincialice para que también sea contra la gestión de Rodolfo Suárez. En el radicalismo, en tanto, insisten en que el peronismo “está detrás” del conflicto para “desestabilizar” al Gobierno.
En la pelea se pueden visualizar dos aspectos en paralelo. Por un lado, el reclamo gremial: ATE lleva a cabo hace más de un mes medidas de fuerza exigiendo aumentos a los bajos salarios que perciben, según afirma, “una gran cantidad de empleados, con sueldos que no superan los $ 12.000 por mes”. Su blanco es el municipio que gobierna la UCR desde 1983, que en medio de esta pelea y a causa de la pandemia, acaba de declarar la emergencia económica y financiera.
Por otro lado, está la pelea política entre los principales partidos de la provincia. El radicalismo denuncia un “plan de extorsión avalado y en parte propagado” por el kirchnerismo, para “desestabilizar” a un departamento que es el bastión del gobernador, como ex jefe comunal; y que tiene como intendente a su sobrino Ulpiano Suárez, ex funcionario provincial en la gestión de Alfredo Cornejo.
La sospecha del oficialismo está puesta en el hecho de que las protestas han sido acompañadas por sectores vinculados al peronismo, y que el paro anunciado por ATE “será en contra del Gobierno provincial”.
De hecho, Roberto Macho, secretario general de ATE, se lo confirmó a Los Andes: su intención es que sea un “paro general” e invitó a “todos los gremios, municipales y provinciales”.
“El Gobierno sigue con los recortes salariales, con despidos indiscriminados, no dan los aumentos de emergencia. Es una olla a presión. Todos los sindicatos pidieron una huelga general y esperamos que entren todos los sindicatos y trabajadores estatales”, comentó el gremialista, y sostuvo que el Poder Ejecutivo “tiene que explicar qué ha hecho o qué va a hacer con los $ 1.200 millones que llegaron de ATN y el préstamo de $ 1.900 millones de la Nación”.
A la movilización que realizó ayer ATE se sumaron la CTA Autónoma (conducida por Macho), el SUTE (en manos de la izquierda); Judiciales; y otros manejados por el kirchnerismo, como la CTA de los Trabajadores y el sindicato de Juegos y Casinos.
La participación de dirigentes peronistas en las protestas anteriores (incluida la del domingo, donde varios terminaron detenidos y denunciaron represión de la Policía) son interpretadas por el intendente capitalino como una muestra de que no se trata de un reclamo salarial. Es “llamativa” esa solidaridad, dijo, y recordó los apoyos a ATE del presidente del PJ, Guillermo Carmona, y del concejal kirchnerista Ernesto Espeche.
De hecho, en un comunicado oficial que está plagado de mensajes al peronismo, la UCR habla de “aprietes y extorsiones sindicales, avaladas por el kirchnerismo”. Además, destaca que “la oposición se disfraza de reclamo sindical, gritando en Mendoza lo que con cobardía y obediencia debida se callan en Buenos Aires y sin ir más lejos en Lavalle, La Paz, Maipú, San Rafael, Santa Rosa y Tunuyán, cuyos salarios están muy por debajo de la línea de pobreza”.
Desde el peronismo respondió Carmona, quien dijo que el radicalismo “intenta presentar lo ocurrido con los municipales como una acción de la oposición disfrazada de reclamo sindical”. y agregó que “basta ver los bonos de los municipales y la ferocidad represiva para descubrir la realidad”.
En ATE también niegan un interés político en su reclamo, al asegurar que la solidaridad peronista se ha dado “por los hechos de represión policial sufridos en tres oportunidades, lo que ha llevado a un repudio generalizado de muchos sectores”.
Además, Macho destacó que si bien el gremio tiene presencia en varios municipios, el problema se generó en Capital “porque los compañeros han estado decididos a pelear. Son ellos los que han planteado las situaciones, y ahí hemos coordinado las reuniones y posteriores protestas”.
“Por más que nos digan que no hay propuesta, vamos a seguir peleando. Llamaremos a una huelga general para el jueves 16 de julio, donde junto a las distintas centrales obreras, gremios, organizaciones sociales y barriales, que paralizará la provincia”, prometió Macho.
Colombo se ofrece como mediador
La Iglesia se ofreció a mediar en el conflicto, según se dijo por pedido de ATE. Durante la mañana de ayer, el arzobispo Marcelo Colombo recibió a los delegados gremiales Roberto Macho y Adriana Iranzo (ATE); Carlos Ordoñez (Judiciales); y Martín Caín (Casino). Después, mediante un documento, el Arzobispado aseguró que “siempre bregará por la promoción de la dignidad de todas las personas, así como la justicia, la paz social y el cuidado de la casa común”.
“El Arzobispo manifestó la disposición de la Iglesia mendocina a contribuir desde su lugar al necesario diálogo social en el difícil contexto que atravesamos a causa del Covid-19, que exige a todos los sectores, responsabilidad en la justa convivencia democrática y el respeto a todas las personas e instituciones”, completó el comunicado.
