El Director de Municipalidades del Tribunal de Cuentas renunció a su cargo político y volvió a su puesto de planta que tenía dentro del mismo organismo. Adrián Cerroni cajoneó y mandó a archivo de dos expedientes de la Municipalidad de Santa Rosa, que contenían los fallos 17.091 del ejercicio 2014 y el 17.092 de 2016. Entre ambos fallos del organismo el ex intendente Sergio Salgado sumaba cargos y multas por 3.833.724, 38 pesos.
Según el informe de Auditoría interna y Control de procesos, las piezas separadas de los fallos de octubre de 2018 llegaron a la oficina de Cerroni el 28 de marzo de 2019 y allí durmieron durante 8 meses hasta que el 26 de noviembre del mismo año pasaron a archivo las 13 piezas de los expedientes. Los papeles nunca hicieron escala por la Secretaría Relatora para la verificación del cumplimiento de los fallos. La suma de todas las falencias en el procedimiento de los expedientes de Santa Rosa concluyeron en la dimisión del ex ministro de Hacienda de Celso Jaque.
La renuncia la aceptó directamente el presidente del Tribunal de Cuentas, Néstor Parés a través de una resolución firmada el día 15 de octubre. No hubo acuerdo de todos los miembros del Tribunal porque los vocales no firmaron. Y desde el 1 de noviembre Cerroni volvió a su cargo de planta.
Lo peor es que desde Fiscalía de Estado informaron que los fallos aún no han sido remitidos al organismo porque lo que están en gestiones para reclamarlos y de esta forma intimar a los sancionados a pagar las sanciones impuestas por el Tribunal de Cuentas, es decir que aún no se inicia el proceso de cobro.
En el fallo 17.091 se sanciona a Salgado y otros ex funcionarios municipales con cargos por 3.751.284 pesos, mientras que en fallo 17.092 Salgado, junto a otros funcionarios fueron sancionados a pagar 82.340 pesos, a pesar de que el ex intendente sólo ocupó el cargo hasta marzo de ese año.
Una curiosidad de ese último fallo, también fue sancionado con multa de 10 mil pesos el ex secretario de Hacienda Marcos Nuarte, funcionario de Norma Trigo, quien reemplazó interinamente a Salgado tras su renuncia.
Informe implacable
La minuciosa tarea de Auditoría interna quedó reflejada en el informe-nota 8359. Los expedientes llegaron al escritorio de Cerroni el 28 de marzo de 2019. Al día siguiente las piezas fueron enviadas a un contador del organismo. “En las piezas separadas se incorporan las constancias de entrega de documentación de Santa Rosa pero no se encuentra ningún sello ni proveído que indique el destino de dichas piezas separadas. Las actuaciones son del 13/11 casi 8 meses posteriores a la remisión de los expedientes al contador revisor”, dice el informe.
“En los expedientes no constan los sellos de recepción de esta documentación así como tampoco los sellos de remisión al contador ni su correspondiente devolución. Dichas constancias solo obran en los registros de Sigesco”, agrega.
Ese mismo día, en el sistema figura que los expedientes fueron remitidos al archivo permanente y confirmados el 26 de noviembre. El otro detalle, es que el sistema todos los movimientos están registrados por un usuario desconocido porque así se toman todos los casos y la información de la persona que había confirmado el remito se obtuvo a través del departamento de Sistemas.
Finalmente, el informe comparó lo que pasó con los expedientes de Santa Rosa y el procedimiento administrativo usual vigente en el Tribunal de Cuentas. “Correspondía que las piezas separadas una vez devuelta la documentación se hubieran remitido por parte del sector Municipalidades a Secretaría relatora para la verificación del cumplimiento de fallos. No se debían remitir las actuaciones sin ningún proveído directamente al archivo permanente”, concluye el documento.
Además, la Auditoría encontró fallas en el sector de archivos donde se debería haber verificado la existencia del check list de la Secretaría relatora con el cumplimiento de fallos. “En este caso no existe ninguna decisión expresa que ordene remitir archivo el archivo permanente”, dice el informe.
Carrera estatal
Adrián Cerroni es contador público. En 1990 entró a trabajar en el Ministerio de Hacienda. Allí se desempeñó hasta 2004 cuando fue trasladado a Tesorería General. En 2007, el peronista Celso Jaque lo nombró ministro de Hacienda y ejerció ese cargo hasta que terminó la gobernación del malargüino.
Durante su gestión hizo el traspaso de su cargo de planta de Hacienda al Tribunal de Cuentas. El pase se realizó de una forma poco usual: el traslado fue firmado en 2009 por el entonces ministro de Producción Guillermo Migliozzi, en un interín cuando estaba a cargo de la cartera de Hacienda, por ausencia de Cerroni.
El radical Daniel Vilches que en ese momento era diputado provincial denunció la maniobra que calificó de antiética porque no correspondía que después estuviera en un órgano de control que debía auditar su gestión en la cartera de Hacienda.
Por su parte, Cerroni dijo que el traslado lo había solicitado en 2005 el presidente del Tribunal de Cuentas Carlos Farrugia pero que la gestión radical se lo había negado.
Finalmente, Cerroni asumió en 2012 en su nuevo cargo de planta como subdirector del área Municipalidades del Tribunal de Cuentas y una de las primeras cosas que hizo fue pedir las licencias no gozadas.
Por acuerdo (firmado por todos los miembros) le dan una clase 71 con reserva de empleo para que se haga cargo de la dirección de Municipalidades de forma provisoria. En 2017, un nuevo acuerdo le da la clase 76 . Por lo tanto, pidió la diferencia de sueldo entre las clases pero la solicitud fue rechazada. Allí trabajó hasta los últimos días de octubre cuando se hizo efectiva su renuncia.
La versión de Cerroni
Según el exdirector de municipalidades su renuncia no está vinculada al problemas de los expedientes. “Padezco una dolencia cardíaca, tengo tres bypass. Por el nivel de estrés del trabajo y problemas familiares el cardiólogo me recomendó bajar un cambio y decidió renunciar a mi cargo político”, explicó Cerroni.
“La renuncia no tiene nada que ver con temas políticos. Lo que pasó con los expedientes fue un error humano involuntario. El contador auditor estuvo con los expedientes esperando que llegara la documentación del municipio como no llegó mandó todas las piezas a mesa de entrada. En mesa de entrada deberían haber mandado las dos piezas separadas a Secretaría Relatora y el resto a archivo. Hubo un error y mandaron todo a archivo”, agregó.
Además, Cerroni insistió en que su trabajo es imparcial. “Yo no estaba al tanto, no tengo relación con Salgado y si hubiera querido ser benévolo hubiera hecho un informe liviano al principio y no fue así. Además, no estaba dentro de mis funciones mandar a archivo un expediente. El cajoneo nunca existió, no hubo animosidad”, detalló.
“En septiembre pidieron el desarchivo, me pidieron un informe y vincularon mi renuncia con el tema de Santa Rosa. Pero no es así. Nunca tuve una sola multa en el Tribunal de Cuentas. Siempre actué de forma independiente. Trabajé con Cobos o Iglesias, me nombraron en el cargo en la gestión de Cornejo. He mandado a multar intendentes de todos los partidos”, cerró.