Sociedad
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hace 7 horas
En dos importantes operativos se lograron secuestrar más de 1.300 kilos de marihuana y desbaratar a una importante banda narco integrada por personas de varios países limítrofes.
El resultado se obtuvo tras una investigación conjunta y de asistencia internacional entre Argentina, por medio de la Dirección General de Lucha contra el Narcotráfico de la Policía de Mendoza, Paraguay (Secretaría Antidrogas) y Chile (Policía de Investigaciones).
Así, personal policial internacional del operativo llamado "Defensores de Chaco" logró desbaratar tras varios meses de trabajo a una organización dedicada al tráfico de estupefacientes que mantenía en su estructura dos ramificaciones de narcotraficantes independientes, integradas por ciudadanos argentinos, chilenos y paraguayos.
El pasado 14 de noviembre, las tareas investigativas y de inteligencia coordinadas en Paraguay y Mendoza culminaron finalmente en Chile con el secuestro de 1.021 kilos de marihuana y la detención de 9 personas que cumplían diversos roles en la estructura de la organización (financistas, distribuidores, transportistas y recaudadores).
En una primera instancia se realizó un procedimiento en la comuna de San Bernardo, en Chile. Allí se logró secuestrar 1.144 ladrillos de marihuana (787 kilos), un vehículo, un arma de fuego y 17.174.000 pesos chilenos. Además se detuvo a una parte de la organización: 2 paraguayos, 2 chilenos y un argentino
Luego la investigación siguió en la comuna Lo Espejo del vecino país. En ese lugar chileno fueron detenidos 4 ciudadanos de Chile y se secuestraron más de 234 kilos de marihuana compactada y distribuida en 304 ladrillos.
Pero a su vez, en base al marco legal de Paraguay y a técnicas de investigación, se logró identificar en Asunción a los proveedores y acopiadores de un considerable cargamento de marihuana.
Esas mismas medidas se aplicaron en Mendoza, donde se logró identificar al financista y coordinador de la banda narco, mientras que en Santiago de Chile también se detuvieron a otros financistas, transportistas, coordinadores, receptores y distribuidores de droga, ya que la ruta de los estupefacientes incluía la salida por el Paso Internacional Cristo Redentor hacia Chile, donde se distribuía y comercializaba la droga.
