Guillermo Barry, uno de los tres fiscales que interviene en la causa por la desaparición de Loan Danilo Peña en Corrientes, aseguró este jueves que la hipótesis sobre el secuestro del menor cobra cada vez más fuerza por lo que las pericias y acciones se direccionan en ese sentido.
El giro en la causa y el impulso sobre la posibilidad de la apropiación del pequeño vino a partir de la reconstrucción de las acciones del día en el que se lo vio por últma vez y de la evaluación sobre la posibilidad de que se haya extraviado en el monte.
“Tuvo un resultado bastante importante la reconstrucción. Hicimos todo el recorrido que hicieron en aquella oportunidad. Estando en el lugar del hecho tuvimos un panorama más claro de las distancias, del recorrido que hicieron, y a partir de eso empieza a debilitarse la hipótesis de que se haya perdido y se fortalece alguna otra hipótesis”, detalló el funcionario judicial a TN.
“Que se produzca casi inmediatamente la búsqueda y no se lo encuentre es llamativo y a su vez fortalece las sospechas sobre los detenidos”, remarcó Barry y agregó que “Lo concreto es que estas tres personas que están detenidas e imputadas, en principio por abandono de persona, mientras no aparezca Loan son responsables de su desaparición. Son las últimas personas que tuvieron contacto con él y tendrían que dar explicaciones concretas”.
“Lo concreto es que estas tres personas que están detenidas e imputadas, en principio por abandono de persona, mientras no aparezca Loan son responsables de su desaparición. Son las últimas personas que tuvieron contacto con él y tendrían que dar explicaciones concretas”, resaltó Barry.
El fiscal se refirió a Bernardino Antonio Benítez -el tío del niño- y una pareja de amigos suyos, Daniel Oscar “Fierrito” Ramírez y Mónica del Carme Millapi.
La hipótesis de que el niño se perdió sólo estaba sostenida por la declaración de los otros chiquitos que estaban en compañía de Loan y declararon en Cámara Gesell y luego ratificaron sus dichos ayer en la reconstrucción en el lugar del hecho: nunca señalaron que había terceras personas en el lugar sobre las cuales podría tejerse alguna sospecha.
Pero habiendo pasado siete días y sin la aparición de Loan, el silencio que guardan los tres acusados y ya medidas de prueba en marcha refuerzan la hipótesis de un secuestro: el análisis de seis teléfonos secuestrados, el barrido de las antenas de telefonía de la zona, el análisis con luminol y perros en los vehículos presentes en el lugar el día que desapareció el niño, y otras en marcha.
Por ahora, los tres detenidos lo están bajo la figura de abandono de persona pero no por la desaparición e incluso en un comunicado los fiscales admiten que eso podría variar en las próximas horas.