Un violento hecho de inseguridad dejó sorprendido al pueblo de Tunuyán, luego de que un grupo de cuatro delincuentes menores de edad protagonizara un “robo piraña” en el cual su única víctima fue un chico de 16 años, que iba camino a su casa. Por los golpes recibidos, el adolescente quedó unas horas ingresado en el hospital local, mientras que a los jóvenes los trasladaron a la comisaría de menores en la Ciudad de Mendoza.
Cuando caía la noche del último miércoles, un muchacho de 16 años emprendió camino a su casa, ubicada en las cercanías del puente del río que limita con San Carlos. Pero cuando iba por el barrio Los Manzanos, en el centro de Tunuyán, un grupo de cuatro adolescentes de su misma edad lo acorraló. Sin previo aviso, lo golpearon y salieron corriendo con un botín de 10.000 pesos, además de otros elementos.
Faltaban apenas 15 minutos para las 21, cuando un llamado al 911 alertaba que un joven yacía golpeado. Quienes llamaron fueron los vecinos que se apiadaron del chico, lo auxiliaron y acompañaron hasta que llegó un móvil de la Policía y una ambulancia del Servicio de Emergencias Coordinado (SEC).
Debido a los golpes que había recibido, la víctima fue trasladada al hospital Scaravelli, donde quedó en observación clínica. Pero, como estaba consciente, alcanzó a explicarles a los uniformados la secuencia de los hechos y lo primero que reveló fue que conocía a los jóvenes que lo habían atacado.
Una vez que los cuatro delincuentes lograron reducirlo le robaron todas las pertenencias que el joven llevaba encima, entre ellas, una riñonera con 10.000 pesos, dos teléfonos celulares y dos máquinas de cortar el cabello. Todas pruebas que indicarían que volvía de trabajar.
A pesar de la velocidad para salir corriendo, la huida de los asaltantes fue en vano. Tres de ellos fueron encontrados por policías en las calles Leopoldo Suárez y Santa Cruz, con las máquinas de peluquería y uno de los celulares sustraídos. Mientras que en la cuadra que sigue dieron con el cuarto muchacho.
Horas más tarde, la víctima fue dada de alta ya que los golpes sólo le habían causado hematomas externos y no eran comprometedores, por lo que se fue a su casa. Sin embargo, los detenidos no tuvieron la misma suerte.
Con los elementos hallados y tras una rueda de reconocimiento, la Fiscalía de Menores ordenó su traslado a la Unidad de Procedimientos y Abordaje de la Niñez y Adolescencia (Upana), en Capital, donde se prevé que sean imputados por robo agravado en poblado y en banda.