Un policía de 47 años está detenido por matar por la espalda a un ladrón que lo asaltó y amenazó con un arma cuando estaba en una parada de colectivo de la ciudad bonaerense de Lomas de Zamora. “Él se defendió y sigue detenido, así es la Justicia”, dijo el abogado defensor Martín Díaz.
El episodio ocurrió alrededor de las 6.15 del 19 de julio pasado, cuando Juan Oscar Miranda (47), capitán de la DDI de San Isidro y con 26 años en la fuerza policial, esperaba un colectivo en la zona de Villa Albertina.
De acuerdo a la pesquisa, el efectivo fue abordado por dos delincuentes de 22 y 25 años con fines de robo, uno de los cuales le puso un arma de fuego en la cabeza y le exigió que entregara su mochila. Si bien el capitán se la dio, los delincuentes regresaron sobre sus pasos para robarle su teléfono celular y una mochila, momento en que el policía se identificó, extrajo un arma que tenía en su cintura y disparó.
El malviviente de 22, identificado como Nicolás Da Silva, recibió un impacto de bala y fue hallado muerto a 170 metros.
Según lo informado por Clarín, los investigadores corroboraron más tarde que el joven fallecido tenía una pistola de juguete y que el video de las cámaras de seguridad muestra cuando el policía le tira por la espalda, pese a que el joven ya había arrojado la mochila en el piso.
La defensa del policía detenido, a cargo de Martín Díaz, reclamó el arresto domiciliario para su cliente y sostuvo que el cómplice tenía un arma verdadera con la que tiró dos veces, mientras que la réplica “fue plantada” en la escena. “Mi cliente respondió con un medio similar al que estaba siendo agredido y solo impacta un disparo a más de 35 metros de distancia y en circunstancia de nocturnidad”, aseguró el letrado.
Por su parte, la fiscal Silvina Estévez, de la UFI 4 de Lomas de Zamora, a cargo de caso, investiga si el policía actuó en exceso de legítima defensa, ya que el presunto asaltante había recibido el balazo en la espalda.
Como no se acreditó que haya habido un tiroteo y el arma de los supuestos delincuentes era de utilería, la fiscal solicitó al juez de garantías Gabriel Vitale que por el momento el policía permanezca en calidad de detenido.
En tanto, tras el arresto del efectivo, de 47 años, el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, mediante la Auditoría General de Asunto Internos, dispuso desafectarlo mientras se lleva a cabo la investigación.
Este viernes se espera la declaración de un testigo que aseguró haber visto al cómplice del ladrón muerto ofreciendo en el barrio un revólver apto para el disparo, apenas dos horas después del hecho.
Mientras tanto, en las redes sociales, los amigos de Da Silva lo despidieron y subieron mensajes en contra del policía. “Asco a la gorra, loco”, publicaron. Uno de ellos subió un mensaje por Facebook en el que señaló: “Te voy a extrañar, recuerdo en la esquina que estábamos re locos, re fumados, me decías que nunca ibas a dejar la delincuencia, que nunca te iba a pasar nada”.
El joven tenía antecedentes por robos e infracción a la ley de drogas. Ya lo conocían en la comisaría 10, donde había recuperado la libertad el 24 de abril.
